La España Vaciada continúa expandiendo su red de trabajo en la provincia de Cuenca con la creación de una nueva agrupación local en Enguídanos, integrada por vecinos y vecinas comprometidos con la defensa del mundo rural. Este nuevo colectivo nace con el objetivo de reactivar la vida social, económica y vecinal del municipio, al tiempo que reclama una gestión más cercana, transparente y responsable con los intereses de sus habitantes.
La iniciativa surge de la unión entre personas del propio pueblo y otras vinculadas a Enguídanos que, desde fuera, observan con preocupación la situación de abandono y el progresivo deterioro del municipio. En palabras de sus promotores, “el pueblo se está muriendo y es necesaria sangre nueva que movilice servicios para la localidad”, advirtiendo además que las previsiones de futuro “son muy negativas” si no se toman medidas urgentes.
El proyecto se apoya en la labor previa de la Asociación Para el Desarrollo del Turismo Rural en Enguídanos, nacida tras el pasado verano a raíz de la posible clausura del paraje natural de Las Chorreras del Cabriel, uno de los enclaves turísticos más emblemáticos de la zona. Aquella iniciativa sirvió de punto de encuentro para canalizar la preocupación vecinal y demostrar que la participación ciudadana puede generar cambios reales.
Desde entonces, el grupo ha mantenido una dinámica activa, promoviendo reuniones, debates y “plenos vecinales paralelos” para plantear propuestas sostenibles y exigir a las instituciones un modelo de gestión que priorice el bienestar del municipio. La agrupación de la España vaciada de Enguídanos estará coordinada por Juan Carlos Guadalajara García, que subraya que el nuevo colectivo “pretende demostrar con hechos que hay voluntad de trabajo, esfuerzo y compromiso desde el primer día”.
En el equipo también participa Fernando Pons, concejal de la Agrupación Independiente de Enguídanos, quien resalta la necesidad de “una gestión municipal más cercana y responsable, que piense en los vecinos y no en los intereses de partido”. Por su parte, la portavoz local de Cuenca Ahora y de la España vaciada en Enguídanos, Gemma Arnánz, señala que “en los últimos años el pueblo ha sufrido un deterioro alarmante: hemos pasado de tener médico todos los días a solo tres por semana, se ha perdido el servicio de biblioteca y seguimos sin transporte público. Mientras tanto, el Ayuntamiento obtiene ingresos de las energías renovables, pero el pueblo se hunde”.
La agrupación centrará su trabajo en tres grandes ejes: la lucha contra la despoblación, la recuperación de los servicios públicos y la reactivación económica a través del turismo sostenible y del apoyo a las pequeñas empresas locales. Además, plantean revisar el modelo de implantación de las energías renovables para asegurar que los beneficios repercutan realmente en el desarrollo de Enguídanos y no se queden en manos de unos pocos.
David Cardeñosa, una de las principales figuras provinciales de los movimientos integrados en la España vaciada por la provincia de Cuenca, ha expresado su satisfacción por este avance. “Enguídanos representa la esencia de la España rural: personas que no se resignan, que se implican, que quieren trabajar por su pueblo y por el futuro de su tierra. Este es el camino: organización, compromiso y esperanza frente a la indiferencia de las administraciones”, ha afirmado.
Con la creación de esta agrupación, la España vaciada refuerza su presencia en la provincia de Cuenca y reafirma su compromiso con un modelo de desarrollo justo, sostenible y participativo, que devuelva vida, oportunidades y dignidad a los pueblos del interior de Castilla-La Mancha.
