El pasado sábado 8 de abril tuvo lugar la primera actividad de la temporada para el Campus Diputación de Cuenca Senderismo 2017. Las onduladas tierras de labor de la parte más occidental de La Sierra Baja conquense fueron en esta ocasión testigo de una actividad tan natural como sana y amena, además de enriquecedora, en la que se dieron cita participantes llegados desde diferentes puntos del centro peninsular.
La localidad de Chumillas, escondida entre recatadas carrascas y altivos molinos de viento, dio la bienvenida a un grupo de unos 40 participantes dispuestos a conocer las costumbres y parajes en torno al Sendero Homologado PR-CU 64 “Sendero de la taina de La Cueva”. El trazado, de 15 kilómetros y dificultad baja, se mostraba en todo su esplendor, inmerso en una tímida primavera.
El alcalde de Chumillas, Pedro de Verona, acompañó durante toda la jornada, ayudando a comprender mejor el medio y los restos arquitectónicos que aparecen, como muestra indiscutible del estrecho trato que ha existido desde siempre entre el hombre y su entorno natural, basado en el respeto y la sostenibilidad.
El buen tiempo acompañó la actividad, si bien la mañana se levantó fresca a pesar del sol que se alzaba en el horizonte. Sin embargo, la brisa insistente hizo muy llevadero el camino, que en ningún momento resultó excesivamente caluroso. La guinda la puso el pequeño Museo Etnográfico, situado en la misma entrada de la población conquense, que permitió a los asistentes conocer los tesoros que allí se encierran, además de explicar los usos e historias de cada uno de los elementos.
En definitiva, un gran comienzo para un Campus Diputación de Cuenca Senderismo 2017, en una actividad que contó con los vecinos de Chumillas como grandes aliados para que resultara todo un éxito.
