La decisión del Ministerio de Fomento de supresión de las líneas de transporte público de viajeros que unen la ciudad de Cuenca con Valencia y Alcázar de San Juan, que tendrá lugar a partir del día 10 de julio, de forma arbitraria y sin consulta a los afectados, deja en el olvido una vez más, por parte del Gobierno Central a esta provincia.
Desde la Unión General de Trabajadores rechazamos esta medida y solicitamos a la Diputación Provincial que se ponga manos a la obra, de forma inmediata, para que revierta.
Es difícil que el problema de la despoblación se solucione, si los pocos medios con los que se cuenta para frenarla son retirados. Así cómo es difícil que empresas que generen riqueza a través del empleo para los y las conquenses y la provincia quieran implantarse en la zona.