La directora general de la Radio Televisión de Castilla-La Mancha (CMM), Carmen Amores, ha vuelto a poner en marcha la política auspiciada por Page y su gobierno de amiguismo y despilfarro, contratando con productoras de fuera de Castilla-La Mancha y pagando favores.
En esta ocasión, la directora general de la Radio Televisión de Castilla-La Mancha (CMM), Carmen Amores, informó en el Consejo de Administración recientemente celebrado del comienzo de la tercera temporada del programa «Variotinto», que se puso en marcha el pasado martes 18 de abril.
Este programa, a pesar de haberse movido en unas cifras ridículas de entre uno y dos puntos de share en sus dos temporadas anteriores, vuelve a la parrilla de CMM. Son dos las productoras que lo llevan a cabo: la madrileña Piraña Producciones, empresa dedicada al «asesoramiento, promoción y organización de eventos mediáticos, congresos y similares» y Fresca Producciones.
El programa lo vuelve a presentar Carlos Iserte y el coste del contrato es de 9.000 euros por programa, según manifestó Carmen Amores en el pasado Consejo de Administración celebrado en marzo.
Política de derroche
Además, tal y como denunció el PP hace unos días, la dirección de la televisión regional continúa con su política privatizadora y de derroche contratando nuevos programas con productoras externas, muchas de ellas de fuera de la región.
Carmen Amores vuelve a despreciar a los 137 redactores audiovisuales (según consta en la web de CMM) de la plantilla y confía en personas de fuera de la televisión pública y en productoras externas, algunas auténticas multinacionales como la del multimillonario Jaume Roures.
La conocida productora audiovisual Mediapro, -en la que trabajó Amores antes de ser contratada por García Candau- ha firmado un contrato con la que la cadena autonómica de Castilla-La Mancha para la realización de nueve programas que, con el título de “Con ton y son”, que se han empezado a emitir el pasado domingo 23 de abril a las 22,30 horas.
Al ser preguntada la directora si el coste del contrato -224.100 euros- no hacía preciso pedir más ofertas a otras productoras, a poder ser de la región, contestó que «no», que era la manera de actuar «habitual» en las televisiones, a pesar de que los consejeros del PP le avisaron de que podía estar cometiendo una «ilegalidad» al ser CMM un ente público sometido a la Ley de Contratos del Sector Público. «Una productora propone el formato; se discute el precio y se aprueba», comentó la directora de CMM.
