Corren buenos tiempos para los parques, jardines, áreas recreativas y espacios verdes del municipio. En las últimas semanas se han plantado los últimos cipreses y madroños, que entregó al consistorio local la corporación provincial. Una convocatoria a la que, en el último mandato, siempre ha accedido la junta local. Y es que en los últimos cuatro años hasta un total de dos centenares de plantas se han instalado entre los tres cascos urbanos que conforman el término.
Arduo trabajo, que se ha llevado a cabo junto con la colaboración desinteresada de un sinfín de voluntarios, que han colaborado en muchos casos en hacendera popular. Con éste ingente esfuerzo, se han revitalizado numerosos lugares comunales y se ha recuperado el ornato en sitios emblemáticos. Y se ha desterrado el mito, de que para ésta labor se necesita un gran esfuerzo económico. De la cantidad total de los nuevos pies instalados, más de de un cuarto corresponden a tejos otorgados por el Ministerio para la transición ecológico y el reto demográfico (MITECO), dentro del Programa Nacional de conservación del Tejo. Éstos, provenían de varios esquejes de dos poblaciones de comunidades que se asentaban en el «Barranco del Hocino», en la localidad, y en otro espacio boscoso de Santa María del Espino. Más de quince años después del pavoroso incendio, han vuelto a su lugar de origen. Por otro lado éste mismo organismo, hizo entrega de más de sesenta plantas de olmos, ya tratados contra la grafiosis, que han sido clonados de especies procedentes de distintas localidades cómo Ademuz (Valencia) o de la Dehesa de la Villa y Dehesa de Amaniel (Madrid). Junto a estas unidades procedentes del Centro de Recursos Genéticos Forestales «Puerta de Hierro» (Madrid), otro grueso importante de recursos también fueron entregados por el homónimo centro de «El Serranillo», muy próximo a la capital provincial y ubicado en la carretera de Fontanar. Otra parte han sido proporcionados por la Excma. Diputación Provincial. En los últimos años, el servicio ha hecho entrega de fresnos, almeces y otras plantas varias. El ayuntamiento ha corrido con los cargo, del otro paquete importante restante.
Pero no sólo las instituciones públicas han fomentado esta revolución forestal. Air Europa, la financiera Oney, la empresa Foxy y la Fundación Alcoraz también han apostado por estos trabajos silvícolas en la localidad, y en los próximos días presentarán el proyecto que se ha iniciado y que busca recuperar y dotar de más masa forestal al antiguo Común de Villar y Tierra de Medinaceli. Junto a esta incitativa, se tiene la voluntad y se adquiere el compromiso de mantener las plantaciones en el futuro y tutelar su crecimiento y adaptación al medio.
Hay que añadir, que los puntos más íntimos de los viales también han sido tratados con rosales, plantas ornamentales y un sinfín de flores de temporada. Se han levantado jardineras de nueva creación, se han reordenado las existentes y se ha sometida a intensos desbroces y limpias, numerosos alcorques. Para estos humildes núcleos, también es vital el servicio de poda provincial, pues los vehículos con cesta favorecen numerosas intervenciones. No sólo se ha trabajado en la instalación de nueva floresta, ya que además se han instalado variados sistemas de riego para favorecer los trabajos de mantenimiento que se requieren y superar la tan temida sequía.
Las áreas recreativas de «Los Casares», «El Puente Viejo», «Parque de la Explanada» o la «Fuente de la Hontanilla» han sido objetos de ambiciosas intervenciones. En algunas de ellas, también se ha contado con la colaboración de TRAGSA, que ha aliviado las faenas pertinentes. Los espacios eclesiásticos también han contado con estas novedades, y se han ejecutado labores de plantación y mantenimiento en la zona de la parroquia de Santa María Magdalena y el entorno de la ermita de la Virgen de Armallak. Las localidades de La Loma y Ribarredonda, que integran esta agrupación, se han sumado a la renovación arbórea y destaca, entre otras ubicaciones, el sembrado en el «Paseo del Cementerio», de ésta última, que se está llevando a cabo por fases.
La realidad de los sencillos núcleos, es que es necesaria contar con la administración pública para seguir con ayudas en tratamientos silvícolas o trabajos ejecutados desde los fondos mejora, cómo se están llevando a cabo en el pinar de «La Tasuguera». Limpiezas importantes en los montes, para la ordenación del territorio, la pervivencia de la masa existente y la prevención de los incendios.
Con la participación de estas mercantiles, y otros proyectos forestales en ciernes, se cierra un mandamiento que se ha traducido en un soplo de vida y de nuevos espacios verdes para provecho y disfrute de todos.
