Una vez más, Quabit Guadalalajara ha dado la vuelta a la tortilla, convirtiendo una situación adversa en una victoria. Mediaba el minuto quince de la primera parte en el polideportivo Artaleku, cuando José Manuel Ramos Padilla se tuvo que retirar del terreno de juego por un esguince del ligamento lateral externo y un esguince del tobillo: “a pesar de ello, el equipo funcionó fenomenal, todo el mundo aportó y conseguimos una victoria en una cancha difícil, controlando el encuentro en todas las facetas del juego. Estoy muy contento y muy orgulloso del equipo”, reconocía César Montes tras el encuentro.
El objetivo de la permanencia todavía no está matemáticamente asegurado y podría ser ante Puerto Sagunto cuando se certificara la buena noticia. A cuatro jornadas del final de la competición, Quabit Guadalajara se sitúa en el noveno puesto de la clasificación, con 22 puntos y mirando hacia arriba.
Dadas las circunstancias y el increíble esfuerzo del equipo, así como los resultados, el próximo viernes será el momento idóneo para que la afición homenajee a los jugadores y al cuerpo técnico con un llenazo en el David Santamaría.
