El portavoz del Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Guadalajara, Daniel Jiménez, ha denunciado graves deficiencias en el servicio que presta la empresa gestora de las dos escuelas infantiles municipales (Manantiales y Alfanhuí) y “la permisividad de Román y su equipo de Gobierno, que no han hecho nada por resolverlas, pese a conocer las quejas que desde hace años vienen planteando los padres y madres de los niños usuarios de ambos centros”.
La denuncia de los incumplimientos de la empresa va acompañada de una propuesta del Grupo Socialista para que el Ayuntamiento ponga en marcha medidas que “garanticen que, a partir del inicio del próximo curso, en el que también tiene que empezar a funcionar un nuevo contrato, las dos escuelas infantiles municipales de Guadalajara ofrezcan un servicio digno”. Tanto denuncia como propuesta de medidas están recogidas en una moción del PSOE que se debatirá en el pleno municipal del próximo viernes.
Incumplimientos del pliego de condiciones de la adjudicación.
La larga lista de incumplimientos del pliego que rige la adjudicación del servicio a la empresa que gestiona ambas escuelas infantiles afecta tanto a los usuarios como a las trabajadoras de los centros, según ha explicado Jiménez. Entre otras deficiencias, ha enumerado: falta de limpieza, escaso servicio de mantenimiento de las instalaciones, deterioro del material que se utiliza en la atención a los niños y niñas e, incluso, dudas sobre la correcta alimentación de los niños, ya que se utiliza un servicio de catering frío que se sirve a los centros con una periodicidad semanal.
El portavoz socialista ha dado varios ejemplos de todas las deficiencias denunciadas, como el hecho de que durante buena parte del pasado invierno no funcionó la caldera de gas-oil en la escuela infantil de Manantiales, lo que provocaba que en las aulas hiciera frío, o la existencia de una gotera en la escuela infantil Alfanhuí por la que se ha tenido el techo abierto durante un año. A esos problemas se añade que “hace años que no se pinta ninguna de las dos escuelas infantiles o que sus zonas exteriores, especialmente la de Manantiales, da pena verlas, porque la empresa adjudicataria está ganando dinero a costa de no cumplir sus obligaciones contractuales”, ha indicado Jiménez.
Retrasos en los pagos a las trabajadoras de las escuelas infantiles.
Junto a los incumplimientos en el servicio que se da a los usuarios, Daniel Jiménez ha denunciado que “la empresa también está incumpliendo sus obligaciones en materia laboral, ya que no está pagando a sus trabajadoras puntualmente y tampoco tiene 18 personas contratadas a tiempo completo, como establece el pliego de concesión, sino solo a 14 en la actualidad”.
A las trabajadoras de ambas escuelas infantiles se les adeuda gran parte la paga extraordinaria del mes de diciembre de 2015 “y es bastante dudoso que vayan a cobrar la extra de este mes de junio”, ha avanzado Jiménez, quien ha explicado que “estamos hablando de nóminas de unos 800 euros netos al mes, que ya es una retribución muy justa para pagar una jornada laboral a tiempo completo”.
Los vecinos de Guadalajara van a pagar 50.000 euros por las reparaciones que no ha realizado la empresa.
El portavoz del Grupo Socialista ha destacado también que, según el pliego de condiciones de la concesión, la empresa adjudicataria tiene la obligación de reparar o reponer los bienes inmuebles, muebles y las instalaciones adscritas a la concesión “pero no lo ha hecho y, en breve, el Ayuntamiento, en lugar de exigirle que cumpla, se va a hacer cargo de esas reparaciones y gastará 50.000 euros de todos los vecinos de Guadalajara”.
“¿Por qué Román, en vez de eludir su obligación de vigilar por el correcto funcionamiento del servicio e ignorar las reiteradas quejas de los padres y madres, no ha sancionado a la empresa?”, ha preguntado Daniel Jiménez, quien ha subrayado que “es otro caso de incumplimiento de un negocio que se lucra explotando instalaciones municipales, pero aquí con una vuelta de tuerca más, ya que el Ayuntamiento paga 8.000 euros mensuales a la empresa, que al mismo tiempo cobra a los usuarios unas tarifas impropias de un servicio público, y encima se hace cargo con el dinero de todos los vecinos de unas reparaciones que la empresa está obligada a realizar”.
Disconformidad con las tarifas que se cobra a los usuarios.
Jiménez también ha expresado “nuestra disconformidad y la de los padres y madres de los niños con las tarifas que se están cobrando, de 304 euros mensuales por jornada completa, pese a que está dando un servicio que no es completo, y sin tener en cuenta la situación de renta de cada familia”.
El portavoz municipal del PSOE ha subrayado que “lo propio de un servicio público es cobrar unas tarifas ajustadas a la situación socioeconómica de cada usuario y no fijar un precio que no representa ninguna ventaja frente a las escuelas infantiles privadas”.
Propuesta de soluciones de cara al nuevo contrato de escuelas infantiles municipales.
El actual contrato de gestión de las escuelas infantiles municipales lleva dos años prorrogado y finaliza definitivamente el próximo mes de septiembre. Por ello, ante el cese de la actual adjudicación y de cara al nuevo contrato que debe realizarse, el Grupo Socialista plantea en su moción varias medidas urgentes para que a partir de octubre se garantice un buen servicio a los usuarios.
Las medidas propuestas por el PSOE son tres: que el alcalde de Guadalajara exija en un plazo no superior a siete días a la empresa adjudicataria que acredite documentalmente el cumplimiento de todas sus obligaciones contractuales: que también en un plazo máximo de siete días se constituya un grupo de trabajo para fijar las condiciones del servicio, con la participación de los representantes de los trabajadores de las escuelas infantiles y de los padres y madres de los niños usuarios de cada una de ellas; y que el alcalde de Guadalajara establezca unas tarifas para las dos escuelas infantiles que tengan en cuenta la situación de renta de cada familia usuaria de los centros.
Por último, Daniel Jiménez ha llamado la atención sobre el hecho de que “a tres meses de la finalización del actual contrato, el equipo de Gobierno de Román aún no tiene elaborado el pliego de condiciones para la próxima concesión, lo que hace temer que no dé tiempo a realizar la nueva adjudicación y peligre la continuidad del servicio”.