El presidente de la Diputación de Cuenca, Benjamín Prieto, se ha desplazado recientemente a la localidad de Villanueva de la Jara con el fin de visitar las obras de rehabilitación del antiguo Convento de Clarisas para ubicar en él un auditorio municipal. Actuación incluida dentro del Plan de Rehabilitación Conservación y Protección del Patrimonio de la Diputación, que conlleva una inversión total de 540.000 euros.
Prieto, que ha estado acompañado de la alcaldesa, Mercedes Herreras Fogarty, ha podido comprobar en persona el buen ritmo de los trabajos, que, según la arquitecta del proyecto, Mayte Cuesta, ya han alcanzado el 65 por ciento de su ejecución, lo que para el presidente es una buena noticia.
Y es que, desde su punto de vista, esta intervención tiene una especial relevancia, porque no solo va dirigida a salvar de la ruina a este edificio del siglo XVI, sino también a otorgarle un nuevo uso, una segunda oportunidad como auditorio municipal, lo que, además, va a permitir a la localidad disponer de un recurso hasta ahora inexistente, donde desarrollar en condiciones todo tipo de actividades culturales.
Un doble cometido que para Prieto debe de servir de referente para otros muchos casos similares no solo en la provincia sino también fuera de ella, al igual que está ocurriendo con el proyecto de la Diputación de recuperación de antiguas estaciones de tren ‘Serranía en vía’, que se está poniendo de ejemplo a nivel nacional para dinamizar el territorio y combatir la despoblación.
No es de extrañar, en consecuencia, que haya querido felicitar al Ayuntamiento de Villanueva de la Jara, con su alcaldesa al frente, por su determinación de adquirir este antiguo convento como una manera de preservar el patrimonio y darle una nueva utilidad para el disfrute de los vecinos, reforzando a su vez el atractivo del municipio de cara el visitante con un excepcional conjunto patrimonial.
Rehabilitación
La intervención, que está llevando a cabo el Consistorio con la financiación de la Diputación en este edificio de tres plantas del siglo XVI se centra en su rehabilitación como centro cultural ubicando en él un auditorio municipal. Para ello se iniciaron los trabajos a principios del pasado mes de abril y hasta el momento ya se han acometido las labores de restauración de las cubiertas de las crujías del claustro y de la zona del torreón, además de haber llevado a cabo gran parte de las correspondientes instalaciones de servicios, desde electricidad, agua y saneamiento hasta climatización; todo ello siguiendo las directrices del Servicio de Patrimonio al tratarse de un edificio protegido.
