El presidente de la Diputación de Cuenca, Benjamín Prieto, comparte con Ceder Alcarria Conquense sus inquietudes en torno al problema de la despoblación en nuestra provincia y así se lo ha hecho saber al presidente de este Grupo de Acción Local, Vicente Caballero, y a los integrantes de la Comisión de Despoblación del mismo en el transcurso de la audiencia concedida esta semana en el Palacio Provincial.
Un encuentro que Prieto ha calificado de “productivo”, puesto que no solo se han puesto sobre la mesa los actuales problemas generados por el fenómeno de la despoblación, sino también algunas soluciones con el fin de aprovechar al máximo nuestros recursos propiciando, de esta manera, el afianzamiento de la población en nuestro territorio.
Prieto les ha trasladado el compromiso y la voluntad de la Diputación conquense en la lucha contra la despoblación, constituyendo, según ha dicho, uno de los ejes vertebradores de las políticas y estrategias de esta institución, como, por ejemplo, las inversiones en mejora de infraestructuras y servicios de los municipios de la provincia, incluidas instalaciones para el desarrollo de actividades empresariales, las ayudas al comercio tradicional y el apoyo a los emprendedores de la provincia, a través del mantenimiento de viveros de empresas, el desarrollo de coworking y la concesión de ayudas con el Concurso de Proyectos Empresariales Lanzadera. Todo ello, tal y como ha subrayado, sin olvidar la fuerte apuesta por la rehabilitación y conservación del patrimonio como medio para incrementar el atractivo turístico de nuestros pueblos y dinamizar su economía a través de las empresas culturales y turísticas.
También se ha puesto sobre la mesa las deficiencias en telecomunicaciones que viene lastrando el medio rural conquense desde hace muchos años y ante lo que Prieto ha garantizado que esta Diputación será especialmente reivindicativa ante otras administraciones colaborando en la medida de sus posibilidades para eliminar estas carencias de muchas zonas de nuestra provincia.
Y es que el presidente de la Diputación considera que la despoblación es un problema de todos, de ahí que haga un llamamiento al resto de instituciones, como el Estado y la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, para aunar esfuerzos contra este fenómeno que está castigando a muchas provincias, en especial a la de Cuenca.
Y, en este sentido, ha instado al Gobierno castellano-manchego a que abandone la desidia que viene demostrando desde el principio de esta legislatura con los más de 1.100 millones de euros del Plan de Desarrollo Rural y, por ejemplo, ponga de una vez por todas a disposición de la Diputación conquense los ocho millones de euros de fondos comunitarios asignados por el anterior Ejecutivo regional tanto para la recuperación de patrimonio histórico y políticas activas de empleo como para la línea de ayudas encaminada a mejorar las pequeñas y medianas empresas (pymes) del sector turístico y hostelero de la provincia.
De esta manera, en su opinión, la colaboración institucional sí se convertiría en un arma eficaz contra la despoblación permitiendo invertir todos estos fondos en los municipios de nuestra provincia buscando generar oportunidades de desarrollo y establecimiento de empresas y personas.
