La Universidad de Castilla-La Mancha ampliará el próximo curso su oferta educativa, incorporando estudios superiores de Informática en Talavera de la Reina (Toledo) y de Turismo en el campus de Cuenca.
Así lo ha avanzado el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, durante la inauguración de la nueva estación de Gas Natural Comprimido (GNC) y Gas Natural Licuado (GNL) que la Empresa Nacional de Electricidad S.A. (Endesa), Calidad Pascual y la empresa local ‘Transcentro Marín’ han puesto en marcha en el entorno de la Autovía del Sur; un acto en el que el presidente regional ha estado acompañado, entre otros, por la consejera de Economía, Empresas y Empleo, Patricia Franco; el director general de Comercialización de Endesa, Javier Uriarte; el gerente de ‘Transcentro Marín’, Carlos Marín; el director de Movilidad Sostenible de ‘Calidad Pascual’, José Carlos Espeso; y la alcaldesa de la localidad, Gema García.
El presidente del Ejecutivo autonómico ha apostado por seguir implementando las medidas a favor del medio ambiente y del desarrollo económico sostenible de la región, del mismo modo que se está invirtiendo en mejorar la oferta educativa de Castilla-La Mancha.
En este sentido, también ha valorado el descenso del fracaso académico universitario de un 7% que se ha registrado en la UCLM desde el inicio de la legislatura, lo que significa, ha apuntado García-Page, que “invertir bien” y hacerlo en Educación está reportando “datos positivos” al conjunto de la sociedad castellano-manchega.
El PIB de Castilla-La Mancha supera los 41.000 millones de euros
El presidente de Castilla-La Mancha ha tenido palabras de reconocimiento para Endesa, Transcentro Marín y Grupo Pascual como muestra de la buena salud de la economía castellano-manchega, empresas que “no solo pueden aportar optimismo, sino esperanza en que las cosas van a ir a mejor”.
Al hilo de estas declaraciones, García-Page ha celebrado que la región haya superado, por primera vez en su historia, los 41.000 millones de euros de Producto Interior Bruto (PIB), lo que significa que “hayamos batido récords de riqueza en Castilla-La Mancha”.
En esta misma línea, ha celebrado que la región encabece actualmente la clasificación de las comunidades autónomas en cuanto a natalidad y confianza empresarial, algo que ha achacado, entre otros, a que “aquí se le abren las puertas” a las empresas y se las “atiende, ayuda y estimula”, además de a la “paz social” que caracteriza a la economía castellano-manchega, como región con menor número de horas perdidas por conflictividad laboral.
El presidente ha aplaudido asimismo el “cambio de mentalidad” experimentado por el tejido empresarial de Castilla-La Mancha como uno de los mayores éxitos de la Constitución de 1978; algo, ha abundado, que ha repercutido en beneficio de sectores “estratégicos” para la región, como el agroalimentario -cuyo peso en el PIB ha pasado del 13 al 15%- y que, al mismo tiempo, ha propiciado la apertura de los productos castellano-manchegos hacia mercados exteriores.