La Casa de la Cultura de Azuqueca de Henares acogió ayer la presentación de Logos, primera novela publicada de Noé Codonal (1976, Guadalajara). El acto contó también con la presencia de Lidia Casado, responsable del taller de escritura que se imparte en la Biblioteca Municipal Almudena Grandes, y de Iván Casuso, de Inventa Editores. Entre el numeroso público asistente también se encontraban las alumnas y alumnos del programa literario que ha contribuido al impulso de Logos.
La obra recrea la existencia de un universo al que cuatro jóvenes amigos llegan por azar, a través de un portal oculto en una casa abandonada. En la tierra de Logos, donde conviven la magia y los animales legendarios, el rey hechicero dirige a su pueblo con mano férrea. Debe conjurar cada día el amanecer para que el reino no se suma en la más completa oscuridad provocando desastres que podrían causar el fin de ese mundo mágico.
Los protagonistas tendrán que recorrer esas misteriosas tierras viviendo aventuras y aprendiendo los caminos de la magia para conseguir cumplir su único deseo: volver juntos a su hogar.
El arraigo familiar y personal de Noé Codonal también se refleja en la novela, ya que en la misma aparecen numerosas referencias a lugares de ese mundo mágico cuyo nombre evoca localidades y paisajes de la provincia de Guadalajara. Logos es su ópera prima, una original novela juvenil, con una prosa atractiva y fluida, que nos retrotrae a clásicas historias fantásticas y de aventuras como La historia interminable, La princesa prometida o las Crónicas de Narnia.
En el acto de presentación, el autor quiso destacar el impulso recibido por el taller literario que dirige Lidia Casado en Azuqueca de Henares, como lugar de encuentro en el que compartir la pasión por escribir y recibir el empujón definitivo para lanzarse a la creación.
También resaltó la importancia de contar con el aval de un equipo editorial profesional, cuyas aportaciones, entre las que sobresale su original portada, han contribuido para hacer llegar a los lectores una novela que ayer fue recibida con entusiasmo en la Casa de la Cultura azudense.
