Como es conocido, desde el pasado 8 de enero con la llegada de la borrasca Filomena que dejó sorprendidos a todos los conquenses ante la gran cantidad de nieve y viento que trajo consigo, la línea de tren convencional que une la capital conquense con el municipio valenciano de Utiel se ha visto interrumpida debido, según Adif, al riesgo de caídas de árboles sobre la vía. En este tramo de la línea 48 de Media Distancia se encuentran municipios conquenses como Cañada del Hoyo, Carboneras de Guadazaón, Arguisuelas o Cardenete, para los que este tren supone un medio de transporte hacia la capital o entre municipios para aquellos residentes que no pueden usar un vehículo privado.
Desde Manifiesto por Cuenca queremos alzar la voz ante esta situación ya que supone, una vez más, abandono y dejadez hacia la provincia de Cuenca y sus habitantes. Ya ha pasado más de un mes desde que el servicio fue interrumpido y no hay fecha concreta para su restablecimiento. Tampoco ha habido ningún otro medio alternativo que haga esta ruta en sustitución del tren y desde esta futura asociación nos tememos lo peor: que estas interrupciones sean cada vez más frecuentes hasta una suspensión definitiva en el medio plazo. Esto podría contribuir al aumento de la ya gran despoblación existente en nuestra provincia, al éxodo de las personas de estos municipios hacia otros lugares donde la accesibilidad a servicios esenciales no implique un problema de transporte y, por consiguiente, a la desaparición de pueblos. De la misma manera, también denunciamos los distintos cierres de estaciones en muchas de estas localidades.
También queremos manifestar la decadencia de la infraestructura de esta línea de tren e instamos a Adif a resolver una cuestión que nos surge: ¿Cuál es el futuro de la misma? La flota de vehículos que circulan por ella fue construida hace más de 30 años y aún funcionan con diésel, un combustible que irá desapareciendo paulatinamente de nuestras vidas y que es perjudicial para el medio ambiente. Esta línea recorre alrededor de 300 km y une poblaciones de tres Comunidades Autónomas, siendo una de las grandes líneas ferroviarias que sigue sin estar electrificada. ¿Se dará algún día este paso hacia la modernidad y la sostenibilidad del medio?
Finalmente, queremos pedir la unión de todas las fuerzas políticas y sociales para la mejora y la defensa de este servicio; que este problema no sea un motivo de reproches en los parlamentos. Es necesaria una voz fuerte y unánime de todos los conquenses para la defensa de lo nuestro. En este sentido, recibimos con alegría la creación de plataformas e iniciativas que apuesten por el tren como medio de transporte de futuro, ecológico y responsable, y mostramos nuestra plena disposición y colaboración con ellas para la consecución de unos objetivos que serán beneficiosos para esta tierra.