El Trasvase estará cerrado en principio hasta diciembre, pero los trasvases se acumularán como el año pasado para volver a llevarse el agua cuando más la necesiten los municipios ribereños. Este último año han salido hacia el Tajo 294 hm3, 78 hm3 menos de lo estipulado, mientras que por la tubería del Trasvase se han desviado 314 hm3 hasta la cuenca del Segura.
A falta de lo que decida el Ministerio, la comisión del Trasvase propone el máximo posible en Nivel 3 a pesar de que la cuenca del Segura sigue almacenando 100 hm3 de agua del Tajo. “Simplemente: nos están machacando, están humillando al Tajo sólo porque pueden, con el beneplácito de la Confederación Hidrográfica y la complicidad de todos los actores implicados”, lamenta la presidenta de la Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía.
Ni la situación en la Región de Murcia ha conseguido cambiar un ápice la dinámica, ni parece que a nadie le importe el río Tajo. La vida sigue igual a ambos lados de la tubería, sin decisiones drásticas que pasen por reducir la superficie de regadío ilegal y legalizada con alevosía desde los años 90.
La impotencia es mayor cuando se observan los datos, “es evidente que han intentado llegar en Nivel 2 para aprobar un trasvase de 27 hm3, a cara descubierta, sin complejos y sin ningún tipo de vergüenza, pero se han quedado a las puertas”, lamenta el vicepresidente Borja Castro.
El técnico de la Asociación, Miguel Ángel Sánchez, advierte: en septiembre se ha desembalsado menos de la mitad de lo que se debería haber sacado hacia el Tajo, 78 hm3 menos si consideramos todo el año hidrológico. “¿El objetivo? Que cada cual saque sus propias conclusiones”.
