Las obras del nuevo complejo hospitalario que construye en Cuenca el Gobierno de Castilla-La Mancha se han ejecutado en un 50,8 por ciento, tal y como ha podido comprobar hoy el presidente regional, Emiliano García-Page, que ha visitado los trabajos de construcción del nuevo hospital acompañado por el vicepresidente primero, José Luis Martínez Guijarro, el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, así como por los arquitectos y representantes de las empresas constructoras.
Atendiendo a las medidas de prevención y seguridad frente a la Covid-19 han recorrido el interior de los diferentes edificios en construcción y han visitado las áreas quirúrgicas, las urgencias, el bloque de consultas y los edificios de hospitalización, en donde han podido conocer cómo serán las habitaciones del nuevo centro hospitalario, algunas de las cuales cuentan con unas impresionantes vistas a la ciudad de Cuenca.
Asimismo, los participantes en la visita, que se ha reducido y dividido en grupos, han contemplado desde la azotea el desarrollo de la ejecución de las obras en las que actualmente trabajan una media de 180 operarios, una cifra que podría llegar los 500 trabajadores antes de que finalice el año.
El avance de los trabajos ha sido notable y se espera que, en esta anualidad, para la que el Gobierno de Castilla-La Mancha ha dispuesto una partida presupuestaria de 29,1 millones de euros, las obras continúen con un buen ritmo.
El nuevo complejo hospitalario que construye en Cuenca el Gobierno de Castilla-La Mancha contará con más de 114.000 metros cuadrados construidos, de los cuales 74.800 metros cuadrados serán de uso hospitalario, distribuidos en cuatro grandes bloques: quirúrgico, hospitalización, consultas y servicios generales.
El futuro hospital universitario de Cuenca contará con un total de 502 camas, 13 quirófanos, dos de los cuales contarán con dimensiones especiales para albergar los denominados “quirófanos inteligentes”, un bloque materno-infantil con UCI Pediátrica, módulos de consultas por especialidades y hasta un millar de plazas de aparcamiento para vehículos.
Tras la paralización de las obras en el año 2012, fue necesario no sólo alcanzar acuerdos con las empresas constructoras en relación a las indemnizaciones tras cuatro años de paralización, las cuales han supuesto más de seis millones de euros, sino además redactar un nuevo proyecto arquitectónico en consonancia con un nuevo Plan Funcional en el que se incluyeron nuevos y más modernos conceptos de atención sanitaria, nueva tecnología y mejor aprovechamiento de los espacios.
La UTE que construye el nuevo hospital de Cuenca está formada por Construcciones Carrascosa, Sarrión Construcciones y Obrascón Huarte Lain (OHL) que revitalizaron la actividad constructiva a finales del año 2017.
Tras la visita, el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, ha afirmado que “a Cuenca le ha sentado muy bien el Gobierno de Emiliano García-Page”.
Asimismo, ha destacado que esta nueva infraestructura sanitaria responde a las expectativas y demandas del presente y del futuro de Cuenca”.
Para concluir, Fernández Sanz ha destacado que en plena etapa COVID, el Gobierno de García-Page no deja de trabajar por el futuro de la Sanidad.
