Vino y poesía han sido siempre una pareja bien avenida. De Anacreonte a Neruda o Jorge Luis Borges pasando, entre tantos y tantos otros, por Li Po, Ibn al-Fárid, Omar Khayyam, Rosalía de Castro, Baudelaire, Nicanor Parra o Claudio Rodríguez, por citar tan sólo unos cuantos ejemplos, el vino, desde las más diversas ópticas y a través de los más varios modos expresivos, ha sido 
una presencia temática constante en la literatura lírica de todos los tiempos y de buena parte de las culturas. Esa relación será el tema de la charla “El vino en la poesía y viceversa” con la que el escritor, ensayista, crítico literario y académico correspondiente de la propia RACAL Amador Palacios cerrará el actual trimestre, último del año y primero del curso 2016-17, del ciclo “Los martes, en la Academia” de la corporación conquense. Será este martes 20 de diciembre, a partir de las ocho de la tarde, en el salón de la institución en la segunda planta del edificio de las antiguas Escuelas de San Antón, junto a la iglesia de la Virgen de la Luz. Por cierto que la convocatoria, fiel a su título, aunará también la disquisición teórica de Palacios con la degustación de una copa de vino cortesía de las bodegas alcazareñas De Alort acompañada, dadas las fechas, por algún mantecado navideño. La entrada como siempre libre y gratuita hasta completar la capacidad del local.
El conferenciante
Amador Palacios es licenciado en Filología Española y está en posesión del Diploma de Estudios Avanzados por sus trabajos de investigación sobre la poesía española del medio siglo. Fundador, director o consejero de diversas publicaciones y colaborador en numerosas revistas de literatura, ha ejercido profusamente el periodismo literario como columnista siendo en la actualidad crítico del suplemento Artes & Letras del diario ABC. Ha sido becario de la Fundación Calouste Gulbenkian de Lisboa por sus trabajos de traducción de la literatura portuguesa, cumpliendo estancias por este motivo en Portugal y el Reino Unido. Becado por la Fundación Olifante, de Zaragoza para realizar un trabajo sobre la poesía de Miguel Labordeta, es miembro del consejo asesor de la Fundación Carlos Edmundo de Ory de Cádiz. Especialista en el movimiento del postismo sobre el que, por ejemplo, publicó el volumen “El pie en la alimaña”, ha biografiado al escritor y traductor Ángel Crespo, ha publicado, bajo el título ¨La flor del humo”, una autobiografía apócrifa de Gabino Alejandro Carriedo y en estos momentos ultima otro trabajo biográfico sobre el poeta Dionisio Cañas. Desde 2013 es académico correspondiente de la RACAL. En su numerosa producción lírica cabe citar poemarios como, entre otros, “Ejercicios de versificación”, “Billete heterónimo”, “Suite de la casa en el campo”, “Tragedias sólo subjetivas”, “Canta y no llores”, “Licencias de pasaje”, “Prosas esculturales y otros poemas”, “Primavera tardía (cancionero)” o “Bajo véspero –dietario poético-”
