La Agencia del Agua de Castilla-La Mancha está realizando diversas pruebas para determinar la procedencia de los nuevos problemas que padece el sistema de captación de agua potable de la localidad ribereña de Chillarón del Rey. Recientemente, la Administración regional solucionaba el principal problema que padecía la captación de este municipio, cuyo sistema de abastecimiento depende de una solución definitiva junto a la de otras localidades del entorno de Entrepeñas y Buendía, consistente en la conclusión de la red de Morillejo por parte del Gobierno de España.
Entretanto, el Gobierno regional procedía recientemente a la sustitución de la bomba que succiona el agua subterránea hacia el depósito de la localidad, ya que el motor sustituido ocasionaba problemas de agotamiento del manantial por un exceso de potencia en la extracción del agua. Tras concluir estas mejoras, que se han aprovechado para limpiar el sistema subterráneo otorgándole una mayor capacidad de almacenamiento y una mayor calidad en la composición del agua, el Ayuntamiento detectó nuevos problemas, cuyo origen están estudiando los técnicos y que están impidiendo la recuperación del sistema.
Los expertos buscan posibles fugas en la red de alta u otras causas que estarían impidiendo a Chillarón contar con agua potable suficiente para garantizar el abastecimiento humano sin tener que depender del uso de camiones cisterna para llenar el depósito, como sucedió a lo largo del verano pasado o en otros períodos de baja pluviosidad. Recientemente, la consejera de Fomento, Elena de la Cruz, visitaba esta localidad y el también pueblo ribereño de Alcocer, donde se han practicado diversas mejoras en sus sistemas de abastecimiento para paliar la carencia de agua que se produce históricamente en época estival y con sus poblaciones aumentadas por la llegada de veraneantes a pesar de encontrarse ambos núcleos en las riberas del pantano de Entrepeñas.
La consejera ha reiterado en distintas ocasiones que en una reunión con la ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, a finales de 2015 en Madrid, ésta se comprometió a que la red de Morillejo estaría terminada o en vías de conclusión alrededor de la primavera de 2016, circunstancia que no llegó a suceder. La consejera reclamaba en la reciente visita cursada a los municipios ribereños agilidad al Gobierno de España para concluir esta infraestructura, ya que requiere una inversión de inferior cuantía en comparación con los alrededor de 100 millones de euros que el Gobierno de España ha invertido o comprometido en la cuenca receptora del agua del Trasvase Tajo-Segura, inversiones que se han visto favorecidas con las últimas ampliaciones del decreto de sequía.
