El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo ha recibido a los representantes de la Asociación Regional de Ganaderos de Porcino (ARGAPOR) de Castilla-La Mancha, que preside Crispín Rodríguez, con los que ha mantenido una reunión, dentro del marco de interlocución abierto con todo el sector agrario regional.
En el encuentro de hoy han tratado asuntos de actualidad que afectan a los ganaderos en el área de las exportaciones. Durante esta reunión, el consejero Martínez Arroyo ha manisfestado su deseo sobre que el presidente de EEUU “no cumpla sus promesas electorales y avance en el desarrollo de un tratado de libre comercio con la Unión Europea, que sea garantista para las dos partes y que beneficie el comercio internacional” que es lo que demanda la industria agroalimentaria de Castilla-La Mancha” y cuya preocupación se ha puesto de relieve en los últimos días.
El titular de Agricultura en Castilla-La Mancha ha reconocido la importancia del sector del porcino en la región, “donde hay 1.700 explotaciones, 3 millones de cabezas de ganado y 6.000 empleos directos”. Ha destacado que es un sector que depende mucho de la exportación y para el cual “es muy importante que seamos capaces de llegar a acuerdos comerciales con otros países, “facilitar el libre comercio con socios comerciales en todo el mundo y, además, también llegar a acuerdos específicos que reconozcan a las empresas exportadoras españolas en mercados como el chino o el estadounidense”, ha manifestado el consejero. Asimismo, es necesario que las empresas estén reconocidas y certificadas para poder exportar, por ejemplo, jamón. “esto lo están haciendo empresas de Castilla-La Mancha y es en la línea en que tenemos que avanzar porque ese sector nos está generando mucha riqueza”.
Además, el Gobierno regional tiene un compromiso con la industria cárnica transformadora de la región, con procesos de integración entre las ganaderías y las empresas, “algo que está ofreciendo garantías de rentabilidad a los ganaderos de porcino”, un asunto en el que se ha avanzado mucho en Castilla-La Mancha con las empresas de jamones y derivados del cerdo.
En este sentido, Martínez Arroyo ha señalado que “tenemos los mejores productos del mundo, los que más garantía tienen, desde la perspectiva de la seguridad alimentaria”, eso hace que las explotaciones tengan que asumir unos costes mayores que en otras partes del mundo pero, a la vez, “son los que hacen que nos presentemos en esos mercados con muchas más garantías sanitarias y de bienestar animal”, ha insistido.
Impulso a los seguros
Precisamente, para ayudar a un sector que asume enormes costes se han adoptado acuerdos como el de los Seguros para los ganaderos, en concreto, el de “retirada de cadáveres”, aumentando en un 11 por ciento en la última convocatoria la subvención de la Junta y con un compromiso de aumento de un 10 por ciento para el próximo año. “Estoy muy orgulloso de haber conseguido ese acuerdo con Agroseguro, de haber vuelto al sistema anterior (de 2011) porque, en definitiva, estamos ayudando a los agricultores y ganaderos de Castilla-La Mancha”, ha asegurado. Y ha lamentado que “no tenía mucho sentido la decisión del Gobierno anterior de exigir a los agricultores y ganaderos que adelantaran que financiaran a la Junta de Castilla-La Mancha la subvención”.
