La Dirección Provincial de la Consejería de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Guadalajara ha determinado que la granja porcina proyectada en Luzón (Guadalajara), con capacidad para 2.000 animales, no necesita someterse a una Evaluación de Impacto Ambiental Ordinaria.
Así consta en la resolución de la Dirección Provincial de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural de Guadalajara, publicada en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha el pasado 19 de abril y que recoge El Digital de Castilla-La Mancha.
En ella se indica que dicha granja, con 2.000 cabezas de ganado previstas, no necesita someterse a una Evaluación de Impacto Ambiental Ordinario «por estimarse que no tiene efectos significativos en el medio ambiente, siempre que se cumplan las medidas ambientales y de seguimiento que propone el promotor y los requisitos ambientales que se desprenden del presente informe de impacto ambiental».
Según dicha resolución «el término municipal de Luzón no se encuentra incluido dentro de zona vulnerable a la contaminación de las aguas producida por nitratos procedentes de fuentes agrarias».
Asimismo, señala que «el proyecto no afecta al dominio público hidráulico ni a sus márgenes de protección», del mismo modo que «tampoco afecta a montes de utilidad pública ni a vías pecuarias» y «se considera que el medio natural tiene una capacidad de carga adecuada para la implantación de este proyecto».
No causa molestias de olor a la población, según el informe
Del mismo modo, recoge que la instalación de esta granja tendrá un impacto en otros aspectos pero será «escaso».
«El olor se reduce exponencialmente con la distancia, por lo que la explotación no debería causar molestias a la población», señala y añade que «la aplicación de los purines al terreno con fines agronómicos podría causar molestias, no obstante un manejo adecuado reducirá esta afección».
Ecologistas en Acción de Guadalajara alertó de este nuevo proyecto de cría intensiva de cerdos en la provincia de Guadalajara, al que se suman más de 2.500 firmas de vecinos de la zona en contra de esta granja que se pretende llevar a cabo dentro de la Red Natura 2000, en la Zona de Especial Conservación «Parameras de Maranchón, Hoz del Mesa y Aragoncillo».
Por su parte, la Asociación Provincial de Agricultores y Ganaderos (APAG) mostró su apoyo al alcalde de Luzón, Francisco Julián Romero, y al proyecto de construcción de una granja de cerdos en la localidad.
Además, APAG dijo que no concebía que con el grave problema de despoblación que sufre la mayor parte de la provincia se diga por parte de grupos ecologistas que un proyecto de este tipo es «la puntilla para el mundo rural» y ha defendido que «si esta empresa ofrece empleo y permite la fijación de dos familias en el pueblo, ya es un éxito para este tipo de localidades; sin olvidar los puestos de trabajo indirectos y el movimiento económico derivado de esta instalación».
