La Guardia Civil de Cuenca, dentro de la denominada Operación “Shikoni” ha desmantelado una plantación de marihuana de más de 8500 plantas, localizada en el término municipal de Mira. En la operación se ha detenido a dos personas, ambos de nacionalidad albanesa, de 46 y 38 años de edad como supuestos autores de un delito contra la salud pública, ya que eran los encargados del sembrado.
La operación ha sido llevada a cabo por parte del Equipo Roca de la Compañía de la Guardia Civil de Cuenca, y ha contado con la colaboración de una veintena de efectivos de Puestos de la Guardia Civil de la compañía conquense.
Esta investigación, enmarcada dentro de los servicios que se llevan cabo por parte de la Comandancia de la Guardia Civil de Cuenca contra el tráfico y cultivo de sustancias estupefacientes, se inició hace más de dos meses; cuando se tuvo conocimiento de que unas personas desconocidas en la zona, podrían estar cultivando marihuana. Tras realizar servicios operativos por lugares de la comarca, los agentes encontraron, en un terreno abrupto y de difícil acceso, un área de cerca de 4 hectáreas de extensión que había sido deforestada previamente y donde actualmente se encontraba la plantación de cannabis sativa.
El pasado día 7 de octubre se puso en marcha un dispositivo por parte de la Guardia Civil compuesto por aproximadamente 25 agentes, donde se pudo sorprender a los dos varones, posteriormente detenidos, cuando se encontraban cortando las plantas y separando las inflorescencias para su posterior secado.
Junto al terreno cultivado se hallaron varios espacios explanados, utilizados uno de ellos para colocar una tienda de campaña, donde pernoctaban los detenidos, otro lugar destinado a cocina, y dos más utilizados como secaderos, además de toda la infraestructura necesaria para el cultivo, incluyendo dos balsas de agua conectadas al río Ojos de Moya mediante mangueras y generadores eléctricos
Los detenidos utilizaban la infraestructura tanto para el cultivo como para su vida diaria, evitando así la necesidad de desplazarse, minimizando así el riesgo de ser detectados.
Asimismo, el lugar escogido por el grupo criminal para realizar el cultivo de marihuana, se encontraba en una zona de difícil acceso; hecho que dificultó la labor investigadora de loa agentes actuantes. En dicha localización se encontraron varias bombonas de butano en la zona acondicionada como cocina, con el consiguiente daño medioambiental que todo esto puede originar.
Por todos estos hechos se instruyeron diligencias que fueron presentadas junto con los detenidos en el Juzgado en funciones de Guardia de Cuenca, dando cuenta de un delito contra la salud pública en su modalidad de cultivo o elaboración de drogas.