“El cierre de la Colección Roberto Polo es el símbolo más claro del fracaso cultural del Gobierno de Page. Casi 10 millones de euros gastados y apenas 171.000 visitantes en seis años. Cada entrada ha costado de media 60 euros al bolsillo de los castellano-manchegos”. Así se ha expresado hoy ante los medios de comunicación el diputado regional del PP de Castilla La Mancha, José Martín-Buro, junto al concejal del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Cuenca, Agustín Segarra, quien ha recordado que esta operación fue vendida en 2017 como un “bombazo cultural” y hoy se demuestra como “un derroche monumental fruto de la improvisación, el sectarismo y la incompetencia”.
Por ello, tal y como ha anunciado Martín-Buro, el PP ha exigido la dimisión inmediata del consejero de Cultura, la auditoría pública de todos los gastos vinculados a la Colección Roberto Polo y la puesta en marcha de un Plan Director de Museos con plantillas estables, infraestructuras modernas e inversión en conservación.
Martín-Buro ha subrayado que el PP ya presentó en las Cortes una batería de medidas para reforzar los museos públicos de Castilla-La Mancha, consolidación de plantillas, eficiencia energética y un plan de choque de 20 millones para renovar exposiciones, todas ellas rechazadas por los diputados socialistas conquenses Guijarro, Jiménez y Godoy. “Mientras los museos públicos languidecen sin presupuesto ni personal, Page financia proyectos privados fallidos”, ha lamentado.
Malabares con barro
Por su parte, el concejal del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Cuenca, Agustín Segarra, ha incidido en que la marcha de la Colección Polo es “una pésima noticia para una ciudad Patrimonio de la Humanidad que no puede permitirse perder espacios expositivos ni proyectos culturales”.
Además, Segarra ha puesto el foco en la “falta total de transparencia” en la gestión cultural del consistorio, tras conocerse que la programación del Teatro Auditorio de Cuenca se ha adjudicado por casi 90.000 euros a una empresa de Madrid “sin informar al Patronato de la Fundación de Cultura, que se reunió en julio sin tratar este asunto”. El edil popular ha denunciado que la decisión se tomó en pleno verano “para que pasara desapercibida”, y ha avanzado que el Grupo Popular ya ha solicitado acceso al expediente y no descarta acudir a la vía administrativa o judicial.
“El futuro cultural de Cuenca no puede construirse sobre cesiones oscuras ni experimentos costosos”, ha concluido Segarra indicando que “lo que necesitamos es inversión seria, estable y transparente en nuestros museos, bibliotecas, teatro y profesionales”.
