Las fiestas celebradas en Azuqueca no han sido del agrado del Grupo Popular Municipal. En su opinión, la organización ha dejado mucho que desear, muchos de los actos han estado marcados por la falta de previsión, ha faltado celeridad en la limpieza de calles y espacios públicos, la participación vecinal ha sido ‘escasa’ -salvo en el caso de los peñistas, “que como siempre se han implicado de lleno y han llevado todo el peso de la fiesta”-, y además, la plaza de toros ha sido “la peor en la historia de las fiestas”. Y todo ello, a pesar del derroche del que ha hecho gala el Equipo de Gobierno, “con un claro tinte electoralista”.
Así, para los ‘populares’ de Azuqueca, las últimas fiestas patronales “han dejado mucho que desear”. “Son las últimas fiestas antes de las elecciones y el alcalde ha tirado la casa por la ventana, pero el resultado no puede ser más patético”, lamenta la portavoz del Grupo Popular Municipal, Aure Hormaechea, asegurando que han recibido multitud de quejas de los azudenses. “Todo el pueblo se ha quejado de la falta de limpieza en las zonas de las peñas y en los parques, después de las verbenas, tanto entre semana como en el fin de semana, que no se ha hecho con la celeridad necesaria”, señala.
Hormaechea denuncia también posibles incumplimientos de la normativa y reglamento sobre los festejos taurinos, inseguridad en las talanqueras del recorrido –con tablones que se rompían y eran superpuestos por otros-, y deficiencias en la plaza de toros, “con operarios cada dos por tres haciendo reparaciones, lo que supondrá un coste añadido, además del riesgo para los aficionados que llevaban el callejón”-; una situación ante la que la propia portavoz del PP llamó a la concejela de Fiestas para pedir que, al menos, se ordenara el desalojo a los burladeros.
En opinión de los concejales del Grupo Popular, a todo ello se une el descontrol de las entradas de la actuación ‘Cantajuegos’, con cientos de quejas de vecinos que han hecho patente su malestar a través de las redes sociales; como también lo han hecho por el concierto de Rafael, “que cantó lo justo para no tener que devolver las entradas”; o sobreventa de entradas pasando el límite de aforo. Desde el PP se critica también la colocación de gradas en todo el recorrido del desfile de carrozas, con un coste que aún se desconoce, y también lo que consideran un “despilfarro total” fuegos artificiales.
Con todo ello, Hormaechea asegura que “el alcalde y su equipo no pasan el corte. Suspenden unas fiestas en las que el alcalde ha sido ‘cansino y omnipresente’, ha querido ser protagonista, y lo ha sido, pero protagonista de un desastre que, afortunadamente, no ha ido a mayores”.
