El auge tecnológico vivido en las últimas décadas y la digitalización propia de la economía han cambiado la forma de hacer negocios. Y de gestionar equipos. En la actualidad, las empresas no se parecen en nada a las de hace 20 años. Y el perfil de los trabajadores mucho menos. Software de última generación, inteligencia artificial, trabajo en remoto, transformación digital, incorporación de freelancers a las plantillas… Son muchas las novedades que han surgido y que están incidiendo en la forma de liderar los equipos. De ahí la importancia de que los responsables dentro de las empresas tengan que actualizarse y renovar conocimientos a la hora de llevar a cabo un efectivo liderazgo empresarial en el contexto de esta nueva economía.
Las personas que asumen el rol de líderes dentro de una organización juegan un papel clave en una compañía. No en vano, son las responsables de marcar y fijar los objetivos de la compañía, motivar a los empleados e implantar un espíritu de trabajo dentro de la organización que, de un modo u otro, incidirá de manera directa en el ambiente laboral y los resultados finales de la organización.
En los últimos años, la gestión de equipos ha cambiado de forma radical y hoy en día los expertos en Recursos Humanos tratan de poner foco en valorar a la persona con el objetivo de mejorar su bienestar y, de este modo, propiciar un incremento de motivación así como su nivel de productividad. Es decir: un trabajador contento y satisfecho es un empleado altamente productivo. Se ha pasado de las típicas estructuras piramidales de las organizaciones de la década de los 80 y 90 a otras más horizontales en las que prima la comunicación, la colaboración y la transparencia.
Nuevas formas de trabajo
A toda esta tendencia, también se ha sumado las nuevas formas de trabajo y la tecnología. Con respecto al primer punto, el impacto de la Covid-19 impulsó de forma inmediata en España el teletrabajo. Miles de personas empezaron a trabajar desde casa debido a las restricciones y demostraron que podían ser igual de competitivos, o más productivos incluso, que trabajando desde la empresa. Con la tecnología existente se hizo palpable que era posible. Y no supuso un trauma para las organizaciones ni para los trabajadores.
Las nuevas herramientas digitales de gestión de equipos permiten mantener una comunicación en tiempo real y sin problemas; la calidad cada vez mayor de las videoconferencias y las reuniones en streaming no solo ha minimizado los gastos en desplazamientos de las compañías, sino que también ha permitido a los empleados mejorar la conciliación laboral. Todo esto ha hecho que el teletrabajo y el trabajo virtual en España haya pasado de un 4% en 2019 (antes de la pandemia) a más del 12% en la actualidad.
Sin embargo, esta nueva forma de trabajo en remoto y virtual requiere de nuevas habilidades por parte de los líderes. Como se suele decir, los responsables de gestionar equipos en España tradicionalmente han sido muy buenos sacando el máximo partido a sus empleados dentro de la oficina. A distancia todavía está por verse tanto a medio como largo plazo. Muchas compañías tienen miedo del trabajo virtual y, de hecho, una buena parte está exigiendo la vuelta presencial a la oficina.
Esta exigencia a la vuelta de la oficina coincide con una demanda cada vez mayor por parte de los empleados del teletrabajo. Conciliación laboral, como dicho, menos desplazamientos en coche y horas dedicadas a ir y volver a la oficina, más descanso, menos dinero invertido en gasolina o transporte público. Los beneficios para el trabajador han sido tantos que los que lo han trabajado no quieren volver e incluso dejan su empresa (o no ingresan en otras) si no ofrecen teletrabajo.
¿Cómo adaptar a los líderes de equipo al trabajo online y virtual?
Además de las habilidades tradicionales de liderazgo, como la capacidad de comunicación y la habilidad para motivar a los empleados, los líderes en la era digital deben ser visionarios, flexibles y capaces de aprender y adaptarse rápidamente a las nuevas tecnologías y formas de trabajo. El liderazgo en la era digital requiere una mentalidad abierta, orientada al aprendizaje continuo y a la innovación.
Entre las características que deben tener los líderes en la era digital destacan:
- Inteligencia digital para comprender las nuevas tecnologías digitales y mejorar la eficiencia y productividad de sus equipos.
- Pensamiento estratégico para identificar oportunidades y desafíos en el entorno digital.
- Gestión del cambio. Esto es la capacidad de liderar y gestionar de manera efectiva los procesos de cambio que surgen debido a la implementación de nuevas tecnologías y formas de trabajo.
- Habilidades de comunicación digital. Conocer y utilizar de manera efectiva diversos canales digitales como plataformas colaborativas (Trello), correos electrónicos, chats y videoconferencias.
Debido a la necesidad de captar talento y retenerlo dentro de las empresas, las habilidades y la capacidad de liderar equipos virtuales son cada vez más demandadas desde un punto de vista empresarial. En una economía globalizada y digitalizada es normal que los líderes tengan que coordinar a equipos con talentos y responsabilidades diferentes y personas dispersas geográficamente.
En esa línea, empresas como Repsol, Iberdrola, Microsoft o Xerox se han sumado a la era del teletrabajo y lo ofrecen a sus empleados como un atractivo más. Entre los resultados obtenidos tras su implantación destacan el aumento del sentimiento de orgullo entre los trabajadores de la plantilla, un menor nivel de estrés y un incremento de su propio rendimiento y productividad.
¿Cómo adquirir las habilidades necesarias para gestionar equipos en la era digital? Los programas formativos de alto nivel especializadas en gestión y administración empresarial, como los masters Executive MBA Online o presenciales, ofrecen a los asistentes la oportunidad de adquirir herramientas y desarrollar competencias directivas a la par de potenciar las aptitudes de motivación, estrategia, comunicación y liderazgo para ponerlas en práctica en entornos de empresas reales y cada vez más globales y digitalizadas.