El delegado de la Junta, Eusebio Robles, ha visitado las instalaciones de la piscina de la Mancomunidad El Berral, que este año se han vuelto a poner en marcha, tras permanecer dos años cerradas, gracias a unas obras de reparación financiadas por el Gobierno regional. El parón en su actividad debido a la pandemia, unido a algunos problemas que habían surgido en las instalaciones, hacía inviable su puesta en marcha este verano, por lo que desde la Mancomunidad solicitaron ayuda económica al Gobierno regional para acometer diferentes trabajos que han permitido reabrirla de nuevo.
La instalación da servicio a las vecinas y vecinos de los municipios que componen la Mancomunidad, que son Alhóndiga, Fuentelencina, Peñalver, Berninches, Moratilla de los Meleros y Valdeconcha. Durante su visita, el delegado de la Junta ha estado acompañado por las alcaldesas de Moratillla de los Meleros y Alhóndiga y los alcaldes de Fuentelencina, Valdeconcha y Berninches.
La piscina se construyó hace una década con financiación del Gobierno regional para dar servicio a estos seis municipios con un ahorro de costes. Con el paso del tiempo comenzaron a surgir algunos problemas en las instalaciones. El sistema de depuración venía presentando deficiencias en su funcionamiento, ya que se producía una importante pérdida de agua en varios tubos, así como una incorrecta impermeabilización de determinadas zonas del vaso. Estas deficiencias ocasionaban también pérdidas de agua, lo que se traducía en mayores costes, con reparaciones puntuales en los sistemas de bombeo e incluso problemas en el terreno ocasionados por las filtraciones. Asimismo, al existir pérdidas continuas era necesario bombear continuamente agua procedente de un pozo, lo que generaba una importante bajada de la temperatura del agua de la piscina.
Una vez ejecutada la obra se han reparado dichas deficiencias, con retirada del solado perimetral del vaso, reparación de los tubos, impermeabilización y reparación del terreno.
Además, las instalaciones cuentan también con un edificio en el que se ubican los vestuarios, baños y taquilla, que presentaba también algunas deficiencias que han sido igualmente subsanadas. La cubierta del inmueble se encontraba afectada por problemas de impermeabilización en los tragaluces y tenía varias goteras. Tras las obras, se han reparado los daños en la cubierta y en el techo interior de pladur causados por la humedad. Se ha pintado el interior del inmueble y se han reparado los inodoros, duchas y puertas dañadas.
El delegado de la Junta ha comprobado la ejecución de todos estos trabajos y ha incidido en la importancia que tienen también “las obras aparentemente menores, principalmente en pequeños municipios, donde con inversiones de este tipo de puede ofrecer de forma mancomunada un servicio público que sería muy costoso para un ayuntamiento de forma individual y que supone un atractivo más para que nuestros pueblos tengan vida y posibilidades de ocio ligadas al periodo estival”.
