«Tercera juventud: la edad de la calma» cuenta con el testimonio de once reconocidas personalidades de Guadalajara muy involucradas en la vida social de la ciudad, cuyo común denominador es haber nacido antes de 1948. Prácticamente todos ellos estuvieron presentes en el estreno del documental, que tuvo lugar en el Auditorio Buero Vallejo el 7 de octubre, dentro de la sección Juventud Acumulada, dedicada a la tercera edad, y que formaba parte de la programación del FESCIGU.
Con la proyección de ayer por la tarde, los ciudadanos de Guadalajara tuvieron la oportunidad de volver a ver este trabajo, documento único que reúne el testimonio de tan importantes personalidades, en esta ocasión no para hablarnos de su trayectoria profesional o su actividad por la que son reconocidas, sino para abrirnos su corazón y mostrarnos su relación con esa etapa de la vida que conocemos como vejez.
Andrés Aberasturi, Antonio Herrera Casado, Blanca Calvo, Isabel Muñoz, Jesús Campoamor, José Antonio Suárez de Puga, José María Bris, Juan Garrido, Julia Simón, Miguel Lezcano y Sara Barceló, son los auténticos protagonistas de esta cinta de 21 minutos de duración, llena de momentos emocionantes, íntimos e inéditos, que nos ayudan a comprender cómo se experimenta la vida según vamos acumulando juventud.
El documental, que se proyectaba al inicio de la sesión, seguido del resto de trabajos programados por la XXI Muestra Alcarreña de Cortometrajes («Las brujas de Villarejo», «Buzón», «Emma», «Padre», «Refugio», «Feliz Navidad desde el Alto Tajo» y «Cuéntame un cuento»), está disponible desde hoy para su visionado en el canal de YouTube del FESCIGU, en el siguiente enlace: https://youtu.be/aLxYSAKu57Y?
Continuando con las actividades programadas por el XXI FESCIGU relacionadas con la tercera edad, el próximo jueves, 25 de enero, a las 20:00 horas y en el mismo Teatro Moderno de Guadalajara, en colaboración con AFAGU, tendrá lugar la proyección del documental «Tengo Alzheimer, pero sigo siendo yo», un trabajo de 57 minutos de duración en el que cinco personas valientes nos abren su vida, hablándonos de sus necesidades o de cómo quieren que les trate la sociedad, porque siguen siendo igual de capaces un día después de su diagnóstico de lo que lo eran el día anterior.
