El 23 de septiembre se conmemora el Día Internacional contra la Explotación Sexual y el Tráfico de Mujeres, Niñas y Niños, para dar visibilidad esta forma de esclavitud moderna que supone una grave vulneración de los derechos humanos.
“Desde el Ayuntamiento de Guadalajara somos conscientes que la trata de personas es un gravísimo atentado contra los derechos humanos y hemos propuesto un foro de debate para dar pie a la reflexión en la conmemoración de este día”, ha señalado el concejal de Igualdad, Roberto Narro.
Este foro se celebra este lunes, 23 de septiembre, a las 18 horas, en la Sala Tragaluz del Teatro Buero Vallejo, con la participación de Monserrat Martínez, jefa de la Brigada de Policía Nacional de Extranjería y Fronteras; Mª Cruz García, coordinadora del centro integral Opañel y Mª Jesús Fernández, vicepresidenta de la asociación ACISJF.
“A todas ellas gradezco su compromiso en la prevención y lucha contra la trata de seres humanos, asistencia a las víctimas y aumentar y mecanismos detección, así como mejorar los mecanismos preventivos los de identificación, protección y asistencia de las víctimas de trata de seres humanos en Guadalajara”.
Narro recuerda que según el Informe Global de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) de 2020, la explotación sexual representa el 50% del total de las finalidades de la trata de seres humanos en todo el mundo. Además, del total de víctimas de trata con fines de explotación sexual mujeres y niñas representan el 67% y el 25% respectivamente.
La trata de personas es un gravísimo atentado contra los derechos humanos que se diversifica en varias modalidades: explotación sexual, explotación laboral, trabajos forzados, tráfico de órganos, etc. De estas variantes, la relacionada con la explotación sexual es la más numerosa, constituyendo y conlleva un fuerte componente de género, pues la inmensa mayoría de sus víctimas son mujeres y niñas.
El Plan Estratégico Nacional contra la Trata y la Explotación de Seres Humanos estipula actuaciones específicas y especializadas para problema. Reconoce este este fenómeno como una grave violación de los derechos humanos y incide en la necesidad de abordarlo desde una perspectiva multidisciplinar que priorice la cooperación y coordinación a nivel nacional e internacional.