En este 8 de marzo, Miguel Óscar Aparicio, el alcalde de Azuqueca de Henares, ha reivindicado «el feminismo como sinónimo de justicia y progreso». Lo ha hecho durante el acto organizado por el Ayuntamiento con motivo del Día Internacional de las Mujeres, en el polideportivo La Paz, y que ha tenido como protagonistas a las y los escolares de sexto de Primaria de los colegios de la ciudad.
Con la lectura del Manifesto del 8 de marzo, el primer edil ha destacado el «compromiso del Ayuntamiento para lograr que Azuqueca se sitúe en la vanguardia de los municipios más avanzados en políticas de Igualdad», ha anunciado que trabajará para «avanzar frente a quienes quieren retroceder» y ha invitado a aprovechar esta jornada para «reflexionar sobre qué podemos hacer para lograr la completa igualdad entre hombres y mujeres».
Miguel Óscar Aparicio ha alertado ante los discursos de odio y el negacionismo que se difunden a través de las redes sociales y que suponen «una creciente amenaza a la que se enfrenta la igualdad». «Aún persisten brechas y obstáculos que dificultan una igualdad real entre mujeres y hombres», ha denunciado y ha hecho mención expresa a la «violencia machista intolerable, la explotación, da discriminación, la precariedad laboral, la brecha salarial, los problemas de conciliación o la invisibilidad de los cuidados».
El primer edil ha recordado que el Ayuntamiento de Azuqueca viene desarrollando políticas en favor de la igualdad desde hace años en materia de educación, empleo, conciliación o participación. «Se sigue trabajando de manera transversal para logar la igualdad total y efectiva», ha señalado, y se ha referido a los proyectos de sensibilización y prevención de la violencia de género en los centros educativos, al plan Corresponsables para facilitar la conciliación familiar y laboral, a los planes de igualdad municipales y al funcionamiento del Consejo Local de Igualdad.
Junto al alcalde, han participado en el acto las tenientes de alcalde, María José Pérez, Susana Santiago y Yolanda Rodríguez, y los concejales Piedad Agudo y Rodrigo Vasco