Se me «abren las carnes»cada vez que oigo a algún político provincial reclamar un «pacto por Cuenca», ayudas para la despoblación, o el tan socorrido, ITI (inversión territorial integrada)
Resulta que los vecinos de Priego y de otros 29 municipios más de la comarca, llevan 16 días sin servicio de transporte de autobús por un asunto burocrático que impide a la empresa concesionaria prestar el servicio.
Burocracia sin límites, impagos de la JCCM a la empresa concesionaria, ¿excusas o razones fundadas?
A los usuarios del autobús poco les importa que a la empresa le falte un papel o que la JCCM se retrase en los pagos, los usuarios quieren poder ir al médico a Cuenca, visitar a sus familiares hospitalizados o poder hacer gestiones de cualquier índole privada.
Estamos hablando de personas que no disponen de medios propios para realizar sus desplazamientos y el autobús es su único medio de transporte.
Julián y Milagros son sólo dos afectados que esperaban pacientes la llegada del autobús en la parada de Priego el mismo día en el que suspendió el servicio.
El autobús nunca llegó y como tampoco llegaron ellos a sus citas médicas programadas desde hacía meses.
Personas con nombres y apellidos que se están viendo sometidos a una limitación evidente de su derecho a la movilidad que otorga un servicio público.
Van 16 días sin autobús y no parece que la solución esté a la vuelta de la esquina a tenor de la poca transparencia de nuestro gobierno regional y sus nulas o vagas explicaciones.
¿Como pueden hablar de ayudas a la despoblación , de pacto por Cuenca o del dichoso ITI ,sino son capaces de solucionar un problema tan evidente?
La Ley de Ordenación de Transportes Terrestres (LOTT) es muy clara en su artículo 85, y que dice así:
«En caso de interrupción de un servicio público de transporte regular de viajeros de uso general o de riesgo inminente de que dicha interrupción se produzca, la Administración podrá adoptar una medida de emergencia en forma de adjudicación directa o de acuerdo formal de prórroga de un contrato de gestión de servicio público o de exigencia de prestar determinadas obligaciones de servicio público.»
Esto no solo es una «Situación de emergencia», es un verdadero drama social para una comarca abandonada, y como está ahora de moda decir, «zona desfavorecida»
Como vecino y ciudadano de Priego pido al gobierno de Castilla la Mancha sensibilidad y empatía con los afectados y exijo la puesta en marcha imediata de alternativas para todas las personas afectadas por la interrupción de este servicio público.
