El Ayuntamiento de Trillo, para celebrar el Día de la Madre, programó un concierto de clarinete, que corrió a cargo del cuarteto ‘Clareolo’. Compuesto por cuatro de estos instrumentos, dos altos y dos bajos, la variedad de registros que alcanza la formación “es casi tan amplia como la de una orquesta”, explicaba ayer una de sus integrantes, Mar Poveda. Sus otros tres músicos fueron Fátima Mazcuñán, Andrés Calamardo e Iñaki Peña.
El cuarteto seleccionó para la ocasión una amplia variedad de temas, siempre con la premisa de que fueran familiares a los oídos de los abuelos y abuelas trillanos, que llenaron para la ocasión el salón de actos de la Residencia Fuentealegre, donde tuvo lugar el recital.
La primera composición que interpretó la formación fue la Suite ‘Carmen’ de Bizet. Antes de iniciar cada pieza, Fátima Mazcuñán explicó al público algunas anécdotas relativas a autor y música. Sobre ‘Carmen’ de Bizet, contó que no obtuvo reconocimiento inmediato, más bien al contrario. “Los franceses pensaban que era un poco ordinaria, mientras que para los españoles no representaba ni a la sociedad, ni al folklore, ni, sobre todo, a la mujer española”. Además recordó que Bizet murió de repente, “sin conocer el éxito que alcanzó posteriormente”.
A continuación, ‘Clareolo’ tocó varias piezas de la zarzuela ‘La Gran Vía’ de Chueca y Valverde. “Esta zarzuela, que dura apenas una hora, reúne como personajes a las distintas calles de Madrid, que se quejan de la aparición de una gran avenida que les va a quitar protagonismo”, contó antes de que sonaran. Entre la selección del género chico, la composición más famosa fue la llamada ‘Jota de las tres ratas’, que “ya en su época tuvo un gran éxito porque juega mucho con la sátira e incluso con temas políticos”.
Después, el cuarteto interpretó tres composiciones de Albeniz, ‘Sevilla’, ‘Tango’ y ‘Asturias’, “obras para piano a las que les hemos dado un toque más personal, más clarinetístico, con más color”. Según explicó la intérprete, Albéniz quiso con ellas glosar el folklore español, desde una interpretación pianística, y mostrarlo más allá de nuestras fronteras.
La parte más emocionante del recital llegó al final, con los pasodobles. ‘Clareolo’ interpretó cuatro de los más conocidos y bailados. “Curiosamente todos fueron compuestos a finales del XIX, principios del XX”, dijo. Como en los casos anteriores, Fátima contó algunas historias relacionadas con sus conocidos sones. La selección de obras fue ‘Gerona’ y ‘Gallito’, “que es el nombre de un torero al que homenajeaba”, de S. Lope, ‘La Giralda’, “que se estrenó en la exposición universal de París de 1889, cuando a su autor, E.L. Juarranz “le pidieron un pasodoble para festejar una corrida de toros, pero sin toros”, y ‘Amparito Roca’, compuesto por Jaime Tejedor, que es el himno popular de las fiestas de Santa Tecla (Tarragona). Además, hay una calle en Carlet (Valencia), dedicada a Amparo Roca, que era una alumna de Tejedor, amiga de su hija. Al terminar, el cuarteto fue largamente aplaudido por los trillanos.