Un total de 55 vehículos clásicos, coches y motocicletas, han participado este domingo en la VI Concentración de Vehículos Clásicos y Americanos organizada por la Peña Lakozz, en una de las actividades que ya se ha asentado en el programa de las Fiestas del Cristo de la Expiración.
Mucho público se ha acercado al Ferial a lo largo de la mañana para disfrutar de la exposición de estos viejos coches, en una concentración que ha aglutinado desde vehículos populares de los años 60. 70 y 80; hasta auténticos coches de lujo de esos mismos años. Había Volkswagen Escarabajo y Golf, Citroen «dos caballos», Mercedes, Renault 5, 8 y 12, Simca 1000, Seat 600, 127, 850, 1200 o 1430, Mini, Dodge, Audi y hasta un espectacular Chevrolete Corvette, entre otros muchos modelos. Además de exponerse en el Ferial, han dado también una vuelta por las calles de la localidad llamando la atención de los paseantes. Al final de la mañana, la Peña Lakozz ha entregado un premio al coche más antiguo de los inscritos (un Volkswagen escarabajo de mediados de los 60), y otro al más votado entre los participantes (el magnífico Corvette).
Muchos de los asistentes han aprovechado la cita para quedarse a comer la Paella Popular de las Fiestas, antes de echar el cierre a la jornada. Antes de eso, y paralelamente a la paella, la carpa del Ferial acogía una actuación de rock con «Evolution Party Band», grupo que por segunda vez actuaba en Cabanillas, ofreciendo un fantástico concierto para público familiar que amenizó el vermú.
La formación, compuesta por cinco extraordinarios músicos, ofrece un espectáculo para niños y mayores, en el que simula un viaje por la historia del rock de la mano de una extraterrestre que llega a la tierra. Así, han recorrido las galaxias de los años 60, 70, 80 y 90, interpretando decenas de temas clásicos del rock internacional. La actuación ha animado la mañana en el Ferial durante casi dos horas, mientras se desarrollaba la exposicion de coches clásicos, y entreteniendo la espera hasta la hora de comer.
Finalmente, a las 15 horas acababa la música y comenzaba a servirse la paella popular, que ha reunido a casi 300 comensales.