CEOE-CEPYME Guadalajara considera que, el aumento en el número de desempleados en la provincia de Guadalajara en el mes de abril, un 8,65% más que en el mes anterior, es consecuencia de la crisis económica en la que ya nos encontramos, derivada de la crisis sanitaria causada por el COVID-19.
En total, en este mes de abril, Guadalajara sumó 1.586 parados más, lo que hacen un total de 19.921 desempleados. Subida que también se aprecia si se comparan los datos en términos interanuales, pues, en estos momentos, hay 4.710 parados más que hace un año, lo que supone un 30,9% más.
A nivel regional, en Castilla-La Mancha hay 11.007 parados más que en el mes de marzo, un 5.85% más. En relación al mismo mes de 2019, hay 28.833 parados más, un aumento del 16,94%.
Esta tendencia alcista también se produce a nivel nacional, donde, a final del mes de abril, había 282.891 parados más, siendo el aumento del 7,97%, con un total de desempleados en España de 3.831.203 personas.
Ante estos datos, también hay que tener en cuenta que, en estos momentos, están cobrando prestaciones por desempleo 5.197.451 personas, debido al gran número de ERTES. Recordando en este punto que, las personas incluidas en un ERTE, no computan como desempleadas de cara a las estadísticas del paro registrado, de ahí la diferencia entre las personas que figuran como parados y aquellas que cobran una prestación por desempleo.
En la provincia de Guadalajara están contabilizados cerca de 2.000 ERTES y más de 8.600 trabajadores afectados.
Ante estos datos, y siempre respetando las medidas sanitarias adoptadas para luchar contra el coronavirus, desde CEOE-CEPYME Guadalajara se observa una crisis económica generada por la paralización de las actividades económicas impuesta por el Gobierno tras la declaración del estado de alarma por el coronavirus.
Esta paralización empresarial se une a la falta de medidas fiscales y de compensación económica a las empresas de la provincia, por lo que desde la Patronal alcarreña se augura una mayor subida del paro en los próximos meses, si no se toman las medidas adecuadas para el mantenimiento del empleo. Pues, con la falta de estas medidas, serán muchas las empresas que, tras la finalización del estado de alarma, no vuelvan a abrir sus puertas, con la consecuente destrucción de empleo y riqueza para la provincia de Guadalajara.
Desde la Confederación de empresarios de Guadalajara, vemos como, se siguen aprobando medidas sociales, necesarias, pero se siguen olvidando de colectivos como los autónomos, y más en una provincia con un colectivo empresarial el del medio rural muy importante.
Consideramos que el aplazamiento de los impuestos o incluso, de las cuotas de la seguridad social, no son suficientes, pues al final, tarde o temprano, se tendrán que pagar, creemos que, si no hay ingresos, se debería exonerar el pago de los impuestos y no aplazarse, pues esto es pan para hoy y hambre para mañana.
Otra de las peticiones que se hace por parte de las empresas es la importancia de prorrogar los ERTES más allá de la finalización del estado de alarma, pues la recuperación económica y del consumo no será inmediata y la gran mayoría de las PYMEs y autónomos no podrán asumir el coste de volver a reincorporar a sus trabajadores a la vida activa. Y, con esta ampliación de los ERTES, lo que se consigue no es otra cosa que el mantenimiento del empleo y que las empresas vayan incorporando a sus trabajadores en función de sus necesidades productivas.
Así, desde CEOE-CEPYME Guadalajara se solicita al Gobierno de España, un apoyo decidido y real a las pymes y autónomos de la provincia de Guadalajara.
