Cáritas Congo ha agradecido a la Diputación Provincial de Cuenca el apoyo económico que viene recibiendo a través de Cáritas Diocesana de Cuenca y que le está permitiendo atender a los refugiados centroafricanos asentados en República del Congo. Y lo ha hecho de la mano de su representante, Jean Baptiste Kintombo, que, aprovechando su estancia en Cuenca, ha querido visitar este martes el Palacio Provincial con el fin de transmitir en persona al presidente de la Diputación, Benjamín Prieto, el agradecimiento de su ONG por el constante respaldo de la institución provincial a proyectos de ayuda humanitaria y emergencia.
Kintombo, que ha acudido acompañado de la responsable de Cooperación y Voluntariado de Cáritas Diocesana de Cuenca, Elisa Bayo, ha mantenido un encuentro con Prieto, en el que también han estado presentes el vicepresidente de la Diputación, Julián Huete, y el diputado de Servicios Sociales, Francisco Javier Doménech. Una reunión en la que el representante de la organización benéfica centroafricana ha hecho una radiografía de la actual situación de su país y de la ejecución de este proyecto de atención a refugiados centroafricanos en República del Congo, por el que la Diputación conquense concedió el pasado mes de julio a Cáritas Diocesana de Cuenca 18.000 euros de ayuda humanitaria y de emergencia.
Una ayuda con la que, través de Cáritas Congo, se trabaja para proporcionar la subsistencia a un total de 1.100 personas pertenecientes a unas 571 familias de refugiados centroafricanos que se encuentran en las localidades de República del Congo de Bétou, Ibenga, Longa y Dongou. Un proyecto similar por el que Cáritas Cuenca también recibió el año pasado otra ayuda de acción humanitaria y emergencia del mismo importe, en ese caso para la asistencia a refugiados asentados en las localidades de Impfondo, capital del Departamento de Likouala; Bétou, al norte de dicho Departamento; y en Brazzaville, capital del país.
Prieto ha resaltado el gran esfuerzo que viene haciendo la Diputación conquense en los últimos años en materia de cooperación internacional al desarrollo habiendo mantenido, a pesar de la fuerte crisis económica, una partida de 90.000 euros para tal fin, distribuida en cuatro ayudas de 18.000 euros para proyectos de cooperación internacional al desarrollo y una quinta, con el mismo importe, para una acción de ayuda humanitaria y emergencia, como ha sido el caso del proyecto de Cáritas Diocesana de Cuenca en República del Congo.
El presidente, por último, no ha querido dejar pasar la oportunidad de animar a Kintombo a continuar desempeñando esa gran labor educadora en su país. Y es que no hay que olvidar que este sacerdote de la Diócesis de Kinkala es el responsable de las Escuelas Católicas de esta Diócesis, coordinador del Colegio de Educación Secundaria de San Agustín de Kinkala, profesor de español en el Liceo público y responsable de la Comisión para las Vocaciones en la misma Diócesis.
