La mañana del día de Nochevieja ha estado llena de actividad en Cabanillas del Campo, con la celebración de la 2ª Carrera San Silvestre Cabanillera, y la posterior fiesta «Adiós 2018», celebrada a mediodía en la Plaza del Pueblo.
Casi un centenar de participantes, entre la prueba de adultos y la infantil, han tomado parte en esta II San Silvestre. A las 10:30 de la mañana se daba la salida a la prueba de corredores adultos. Era una carrera no competitiva, con ambiente lúdico y festivo, en la que varios de los participantes siguieron la recomendación de correr ataviados con adornos navideños, o disfrazados para la ocasión. Cubrieron un recorrido de 2.500 metros por las calles del municipio, sin demasiadas exigencias deportivas y sin mirar el cronómetro. El objetivo no era ganar, sino divertirse un poco. Luego, a las 11, era el turno de los niños y niñas más pequeños, quienes tuvieron su propia San Silvestre con una carrera de 400 metros, en una vuelta alrededor de la Plaza del Pueblo. Ambas pruebas estuvieron coordinadas por el personal de la Concejalía de Deportes, y contaron con la colaboración de los voluntarios de Protección Civil y de la Policía Local.
Tras las carreras se habilitó un parque de hinchables en la Plaza del Pueblo, muy celebrado por los más pequeños; y comenzó un reparto de sidra, refrescos, uvas, gominolas y bolsas de cotillón, con el fin de celebrar unas campanadas adelantadas, a las 12 del mediodía. Cientos de personas se asomaron entonces a la Plaza para confraternizar con los vecinos en esta despedida de 2018, que se cerró con las citadas campanadas, una traca desde el tejado del Ayuntamiento, y una mañana de música con una disco móvil para animar el vermú.
