El Grupo Municipal Ahora Guadalajara ha denunciado hoy, en una valoración sobre los presupuestos del Patronato Deportivo Municipal (PDM), que los “despilfarros en saraos deportivos” del equipo de Gobierno en 2018 se han traducido en “recortes en las subvenciones a los clubes y a deportistas individuales”.
Así lo entiende el portavoz de Ahora Guadalajara, José Morales, que ha apuntado que el equipo de Gobierno se ha gastado el doble de lo presupuestado en eventos deportivos: “Se presupuestaron inicialmente 625.000€, y ya dijimos que era increíble, y ahora vemos que hemos gastado 1,2 millones de euros, el doble de lo inicialmente presupuestado, en estos saraos deportivos”. Morales ha argumentado su crítica con el desglose de esos gastos en el año de la Ciudad Europea del Deporte: “En eventos internacionales, hemos triplicado lo presupuestado; en los nacionales, hemos duplicado; y en los locales y provinciales no hemos llegado a lo que se presupuestó”. Y ha proseguido: “El presupuesto es finito, hay cuestiones que no se pueden tocar como nóminas, contratos en vigor sujetos a pliego de condiciones, mantenimiento, luz, gas… Hay que reducir de donde se puede y el equipo de Gobierno lo ha hecho de las subvenciones a clubes”. Así, según ha insistido el portavoz de Ahora Guadalajara, “de 500.000€ presupuestados en subvenciones a clubes y deportistas individuales, se han gastado solo 350.000. Los despilfarros en los saraos deportivos han sido los recortes en las subvenciones a los clubes”, ha reiterado.
Ingresos “inflados”
Morales ha proseguido analizando las cuentas del PDM recordando que “de un presupuesto de 6 millones de euros, el Patronato no ha sido capaz de gastar en tiempo, de obligaciones que tiene reconocidas, 1 millón de euros”. Además, tras analizar la liquidación de 2018, ha apuntado que “ya dijimos que habían inflado las partidas de ingresos por cuotas de escuelas deportivas y cursos de natación, y que dotaban a la baja los gastos en energía eléctrica, y ha habido que hacer modificación de crédito para poder pagar esos gastos”.
Para Ahora Guadalajara, el equipo de Gobierno “insiste para 2019 en este modelo de retorcer los ingresos y los gastos para que el presupuesto cuadre, cuando los gastos dicen lo contrario”. La formación también se ha referido a dos apreciaciones del Interventor del PDM. En una habla de que “sería oportuno incrementar los precios públicos, así como mejorar la gestión de los mismos”. “Hay que subir los precios, porque si no este presupuesto no cabe”, ha interpretado Morales. “Y también habla de instaurar el cobro de contratación de publicidad en los espacios deportivos de la ciudad: está presupuestado, por tercer año consecutivo, en 75.000€ y en los dos anteriores ingresamos cero por ese concepto”, ha lamentado.
Precariedad en el PDM
Por último, Ahora Guadalajara ha denunciado la falta de personal y la “precariedad” del PDM. Así, la plantilla de personal real comparada con la que dice la RPT (Relación de Puestos de Trabajo) evidencia que “solo está ocupado el 70% de la plantilla”. “El Tribunal de Cuentas ya lo criticó: se abusa de la hora extra y de la hora complementaria”, ha dicho Morales. El portavoz de Ahora Guadalajara ha continuado asegurando que “la precariedad está muy extendida en el PDM, no solo entre las empresas concesionarias como ya hemos denunciado, sino también entre la propia plantilla del Ayuntamiento”. “Esta precariedad no es decente en ninguna parte, y mucho menos en un Ayuntamiento saneado como es el de Guadalajara”, ha asegurado.
La conclusión de Ahora Guadalajara es que “hay cantidad de problemas estructurales que no se resuelven porque el PDM vive en una espiral de organización de eventos deportivos, que no repercuten en el deporte que practica la población de Guadalajara. Los estatutos del PDM dicen que está para fomentar la cultura deportiva, y la cultura deportiva no es el ‘sillón ball’; no es ser espectador, es practicar deporte”. Ante ello, la formación propone “apostar por el servicio público” y “hacer menos saraos y tener el margen para bajar tasas y precios públicos, justo el sentido opuesto al que indican estos presupuestos”.