El alcalde de Cuenca, Darío Dolz, ha visitado hoy las obras de reparación de imbornales y sumideros de pluviales de las calles Cristo del Amparo y Ricardo Rábanos, que hoy mismo se han vuelto a abrir al tráfico rodado.
Dolz se ha mostrado muy satisfecho por el resultado de los trabajos que ha ejecutado la empresa Villaescusa S.A. a través de la empresa pública “Aguas de Cuenca”, pues aunque el plazo de ejecución era de un mes se han completado en apenas diez días, ahorrando molestias a los vecinos.
El alcalde ha dado los detalles de esta actuación, que ha supuesto una inversión de algo más de 31,000 euros y ha consistido en la reparación de ocho baterías de imbornales que cruzan la calle transversalmente y la sustitución de las rejillas de función por otras de alta resistencia y aptas para el tráfico denso y pesado.
Además, para evitar ruidos por la holgura de las piezas metálicas y se han colocado bandas de neopreno fijadas al cerco con masilla de elasticidad elasticidad permanente.
Dolz también ha explicado que con esta sustitución se aumenta también la capacidad de retención de pluviales
