CEOE CEPYME Cuenca apunta que son los alimentos y bebidas el motor principal de la economía provincial junto con el turismo y es que estos productos son los protagonistas de algo más del 80% de las ventas que las empresas de la provincia hacen al exterior.
La Confederación de Empresarios de Cuenca apunta que productos como el vino, el ajo, legumbres o cereales han alcanzado en 2017 los 413,4 millones de euros en exportaciones, lo que supone el 80,4% del total de las ventas a otros países de la provincia según indica el Informe Mensual de Comercio Exterior publicado como el Ministerio de Economía, Industria y Competitividad.
De hecho, el total de exportaciones en el año 2017 desde la provincia ha sido de 513,9 millones de euros, lo que sitúa a estos productos como referente no solo exportador, sino también económico y empresarial en la provincia, potencial generador de puestos de trabajo.
Así, hay otros datos como los publicados por el Observatorio Español del Mercado del Vino que señalan que las ventas de este producto al exterior han crecido en la provincia de Cuenca en torno al 35%.
Así, las ventas de caldos a otros países han supuesto durante 2107 una cifra de 110,7 millones de litros, 29,4 millones más que en el año 2016 y un 25% de las exportaciones de alimentos y bebidas, 21,54 % del total de exportaciones de la provincia a otros países.
Después de los productos agroalimentarios, lo más vendido por las empresas de nuestra provincia a otros países han sido los bienes de equipo que acumulan 68,6 millones de euros en ventas y un 13,3% del total, por lo que entre alimentos y bienes de equipo suman casi el 94% de las ventas al exterior de la provincia en 2017.
En Cuenca han sido estos productos por tanto los protagonistas del aumento de las exportaciones en un 9,5% hasta situarse en los 513,9 millones de euros sobre los 469,5 del año anterior.
Saldo comercial
CEOE CEPYME Cuenca también destaca que, pese al aumento de las exportaciones y el buen momento de los productos de alimentación y bebidas, el saldo comercial desciende ligeramente porque nuestra provincia también compra más productos del exterior.
Así, el saldo comercial el año pasado era de 337,1 millones de euros y este año ha descendido a los 324,8, una bajada del -3,6%, aunque esto no es del todo negativo para la Confederación de Empresarios porque también significa que estamos teniendo más capacidad de compra de productos.
Las importaciones producto de este mayor consumo han subido un 42,9%, hasta situarse en los 189,1 millones de euros, muy por encima de los 132,3 del año anterior.
