La Banda de Música de la Diputación de Guadalajara, fiel a su cita anual con la patrona de la música, en su sala habitual como es el Salón de Actos del San José ofreció un brillante concierto con un programa plagado de estrenos que enriquecen su amplio repertorio.
El Banda terminó de forma espectacular con una magnífica interpretación del tema, para variar en un Concierto con tantos estrenos, ya estaba en su repertorio como es «1492, La conquista del Paraíso» compuesto por el griego Vangelis para la película de 1992 de Scott respondiendo a las peticiones del público para el que, a pesar del extenso programa que habían preparado, se les hizo corto, como atestiguan entre otros los diputados provinciales Lucía Enjuto, Jesús Parra y Lucas Castillo, que asistieron a este «fantástico Concierto». Volviendo al principio, bajo la batuta de Nuria Matamala la Banda inició su concierto acudiendo a clásicos como el ruso Shostakovitch, considerado uno de los compositores más importantes del siglo XX que, pese a estar bajo el dominio soviético, escribió obras tan alegres como la «Obertura Festiva» a la que siguió la música de ballet de Prokófiev para «Romeo y Julieta» de Shakespeare.
Y siguiendo el estilo de los últimos conciertos, la banda se decantó por la música de compositores modernos que se populariza con las películas como es el caso de «Rocky» de Bill Conti con letras de Carol Connors y Ayn Robbins, para la película de 1976 interpretada por Stallone como el boxeador Rocky Balboa. «Expo 70″de Paul Yoder para la Exposición Universal de Osaka supuso una pequeña inflexión antes de adentrarse en la música española tan del gusto de su directora con un inevitable pasodoble que en este caso fue «Pontones» del valenciano Ferrer Ferrán y proseguir con la «Granada» de Agustín Lara con una vibrante voz solista que puso emoción en el escenario, desde la que dio el salto casi final -ya hemos dicho que hubo «propina»- a la alegre «Copacabana» escrita e interpretada por Barry Manilow inspirada en este nightclub de La Habana, especialmente su inolvidable bailarina Lola y probablemente en alguno de sus cócteles famosos, una pieza que la Banda de la Diputación interpretó con el vivo ritmo requerido para la ocasión en la que se celebró la patrona de la música. Aunque la celebración fuese con un día de retraso por necesidades de agenda pero sabiendo que todos los santos tienen su octava, y que lo importante era esta nueva cita con la música.
