
“El Casco Antiguo es un entorno muy complicado, y los propios arquitectos reconocieron que jamás se podrá llegar al cien por cien de accesibilidad. Hay que conjugar muy bien soluciones para el turismo y para la población”, ha manifestado y ha asegurado que algunas de las propuestas sólo sirven para los turistas, como por ejemplo el supuesto ascensor que iría del Archivo a la Hoz del Huécar, no sería operativo para las personas que viven en la zona.
“Las soluciones para los vecinos dejan mucho que desear” y ha añadido que a su juicio la solución para conjugar las necesidades de turistas y vecinos serían los microbuses eléctricos o lanzaderas desde el centro de la ciudad.
Huete ha recordado que no se pueden dar ideas aisladas, sino que hay que integrarlas en la revisión del Plan de Ordenación Municipal (POM), que está elaborando el Ayuntamiento de Cuenca, como han reconocido los propios arquitectos que ha elaborado el proyecto. “Dentro de seis o siete meses podremos tener un avance de la revisión del Plan de Ordenación Municipal, y por lo tanto el estudio presentado, como otros de otra índole, tendrá que valorarse a tenor del recorrido que se vaya realizando con la revisión del planeamiento de nuestra ciudad, que es una gran demanda y necesidad”, ha apuntado Huete.
El concejal de Urbanismo ha rechazado la precipitación de algunos a la hora de abordar este asunto, con la presentación de mociones en los últimos meses, y el anuncio de nuevas, pues “lo importante en este tipo de proyectos es la coordinación, siempre teniendo en cuenta que quien debe liderar el Urbanismo en la ciudad es el Ayuntamiento, y las demás Administraciones se pueden y deben sumar, pero con cabeza”, ha dicho.