La falta de lluvias nos ha dao de pleno. Nos ha impedido hacer el camino andando como estamos haciéndolo desde hace ya tantos años, dice Manolo Cardo, ganadero de la Vega del Codorno en la provincia de Cuenca que, tras muchos años haciendo la vereda, se ve obligado a transportar a los animales en camiones desde Mestanza, en el valle de Alcudia, hasta ese lugar tan emblemático del Parque Natural de la Serranía de Cuenca situado a dos kilómetros del Nacimiento del río Cuervo.
Ahora mismo, a dos días de embarcar, las etapas conflictivas son desde Granátula hasta Socuéllamos. Hay explotaciones ganaderas, sí, pero claro, depende de si te quieren dar o no te quieren dar agua, añade Manolo Cardo. Además, es que hay zonas que ni explotaciones ni ná. Que no hay agua y na más así que a los camiones. Los caballos se quedan aquí, en la finca, y ya vendremos a por ellos.
Cerca de Socuéllamos se juntan, o se dividen, las cañadas que según quien, tienen un nombre u otro porque a la altura de Argamasilla la llaman Cañada Real de Cuenca y, por otro lado, la encontramos como de los Chorros. Da igual. Son caminos distintos para términos trashumantes en dirección a Mestanza o a La Carolina desde Socuéllamos que, en el viaje de regreso, que es el caso, incide en las dificultades del camino hasta ese punto de encuentro en que la Cañada Real es la misma para los trashumantes que van en dirección a Cuenca. Manuel Cardo pasa por Puertollano, Granátula de Calatrava, Manzanares, Argamasilla y, ya, a Socuéllamos. Los ganados trashumantes que parten de La Carolina en dirección a Socuéllamos, pasan por Pozo la Serna, Alhambra, Ruidera y, desde aquí, al punto de encuentro en que, como digo, se convierte en Cañada Real de Los Chorros, Serrana, de Cuenca o de Rodrigo Ardaz.
Esto, la trashumancia, que de idílica tiene poco, se basa en un hecho tan sencillo como eficaz: reducir las estaciones del año a dos consiguiendo seis meses de invierno suave (alejado de los hielos y nieves de las montañas) y otros seis de calores llevaderos en la sierra cuando, en Andalucía, el sol achicharra hasta tu sombra. Eso y el valor añadido de hacer el camino a pie a través de Veredas y Cañadas Reales en las que, los animales, en condiciones normales, encuentran comida y van dejando semillas que propician una biodiversidad que todos queremos. Pero en esta ocasión, para Manolo Cardo, la falta de agua supone otro gasto añadido con el que no contaba: si, sí, otros mil quinientos euros por lo menos. No es que no contáramos. Es que no nos viene ni pizca de bien, dice Manolo, porque a esos euros hay que añadir el gasto del invierno o de los inviernos. Que llevamos cuatro inviernos que ha habido que echarles pienso y entre los pastos y el pienso eso suma mucho dinero y trabajo.
Grati Usero
En Santisteban del Puerto, en Jaén, al este de La Carolina, han arrancado esta mañana las mil trescientas ovejas de Grati Usero porque las paridas las hemos llevado en un camión al pueblo. Grati es un ganadero de Las Majadas (Cuenca), del que ya nos hemos ocupado en otras ocasiones: estamos cruzando el río Montizón y vamos a salir a otra finca, a la linde ya porque, mañana, nos situamos en la vereda y a caminar.
Como en el caso de Manolo, Grati, se ha pasado los seis meses de invierno en Santisteban del Puerto. Un invierno malo: ya ves. Duro porque el invierno ha sido malo. No ha llovido, la primavera es mala y qué remedio tenemos. Hay que aceptarlo.
Inician el camino tres personas: Grati que va con el hato, su hijo Rubén y un muchacho de Vilches que han contratado: son unos veinte días de camino por lo que llegaremos al pueblo, a Las Majadas, sobre el mediodía del Martes día 20 de Junio pero hay que andar el camino y pasarlas canutas porque, a La Mancha de Cuenca le tengo pánico. Es donde más se estrecha la vereda. En La Hinojosa es fatal. Hasta que no blincamos a Mota de Altarejos no me quedo tranquilo, dice Grati recordando el viaje pasado porque, en esto de hacer el camino, aún es nuevo.
Estamos a 31 de Mayo cumplido y, los trashumantes, preparan la arrancada. Manolo, de Valdemeca, otro histórico en estas lides, salió el día 14 y está a punto de pasar por la Cañada Real de Rodrigo Ardaz en Cuenca. Es la tradición y, con ella, un cultura que envuelve al más pintao.
