El Grupo Municipal Ahora Guadalajara va a solicitar en el Pleno del Ayuntamiento de mañana viernes que el Consistorio se comprometa a destinar en los presupuestos del año 2018 una cantidad de al menos 350.000 € para iniciar la creación de una red de bibliotecas y servicios bibliotecarios en la ciudad, y cumplir así con la Ley Reguladora de las Bases de Régimen Local de 1985.
a pesar de ser una competencia municipal que marca la ley
La propuesta de la formación llega en forma de moción transaccional a una iniciativa de Ciudadanos (C´s) en la que solicita un plan para el fomento de la lectura: “No puede haber plan para el fomento de la lectura si desde el Ayuntamiento no hay inversión en servicios bibliotecarios”, ha introducido la concejala de Ahora Guadalajara Susana Martínez. “Es como si queremos potenciar la práctica del fútbol sin invertir ni un solo euro en balones o campos”, ha ahondado mediante un símil. De ahí que Ahora Guadalajara presente una transaccional al texto de C´s: “En una ciudad que es conocida como la Ciudad de los Cuentos, pionera en experiencias de animación a la lectura como los clubes de lectura, donde se organizan desde diferentes instituciones, asociaciones y colectivos múltiples propuestas relacionadas con la poesía, la narración oral, los libros y la lectura; lo que necesitamos son bibliotecas municipales, no más actividades”, ha criticado Martínez respecto al texto original que presenta la formación naranja.
Para Ahora Guadalajara, el “mejor fomento de la lectura” se consigue por medio de la “creación de bibliotecas municipales y el trabajo conjunto con la Biblioteca Pública del Estado que tenemos en la ciudad”, según Martínez. Por eso propone precisamente la creación de esa red de bibliotecas, algo que impone la Ley Reguladora de las Bases del Régimen Local de 1985, pues su artículo 26 establece la obligatoriedad de prestar servicios de biblioteca pública en aquellos municipios con una población superior a 5.000 habitantes.
Guadalajara, única capital de España sin biblioteca municipal
Pero es que en materia normativa la región va más allá. Así, la Ley de la Lectura y de las Bibliotecas de Castilla-La Mancha marca la competencia en este servicio en los municipios mayores de 1.000 habitantes. Además, esa Ley señala que todos los municipios de la región de más de 20.000 habitantes deberán disponer de una red municipal de bibliotecas, algo que Guadalajara incumple. Y es que mientras Toledo cuenta con cuatro bibliotecas municipales, Cuenca con tres, Ciudad Real con diez y Albacete con 15, la ciudad no dispone a día de hoy de ninguna. De hecho, Guadalajara es la única capital de provincia de España que no cuenta con bibliotecas municipales.
Sin salir de la provincia también se encuentran otros datos que dejan a la capital en mal lugar: Yebes-Valdeluz, con una población de 3.200 habitantes, destina 80.000 € de las arcas públicas a su servicio bibliotecario; y en Azuqueca, con 35.000 habitantes, la cifra asciende a 275.000 €. “El Ayuntamiento de Guadalajara desatiende el acceso a la información, a la formación y a la lectura; y para garantizarlo se necesitan servicios estables, infraestructuras y profesionales,”, ha insistido Martínez. “No podemos entender que los ayuntamientos de poblaciones mucho más pequeñas hagan el esfuerzo de mantener abiertas bibliotecas municipales y el nuestro no haya hecho el más mínimo esfuerzo. No dedicamos ni un solo euro en un servicio esencial si hablamos de educación, cultura y participación”, ha completado.
La propuesta de Ahora Guadalajara pretende que la red de bibliotecas y servicios bibliotecarios que se cree incluya la puesta en marcha de bibliotecas de doble uso en institutos y centros de enseñanza en colaboración con el Servicio del Libro, Archivos y Bibliotecas de Castilla-La Mancha. Además, plantea puntos de préstamo en piscinas y parques municipales en coordinación con la Biblioteca Pública, y que el Ayuntamiento se comprometa a colaborar y apoyar, económica e institucionalmente, actividades culturales, ferias, festivales y eventos relacionados con la lectura y el fomento del libro que se desarrollen en la ciudad.
