La Consejería de Sanidad, a través de la Dirección General de Salud Pública, ofrece una serie de consejos útiles a las personas consumidoras a la hora de adquirir un juguete, ya que, en estas fechas navideñas, se debe dedicar un tiempo para decidir la compra de regalos y, en particular, los juegos y juguetes para los más pequeños y pequeñas de la familia.
En concreto, han señalado que es muy importante tener siempre presente que las características de estos productos tienen que conjugarse con su seguridad y adecuarse a la edad y el desarrollo de madurez de los niños y niñas.
Asimismo, es conveniente realizar una elección adecuada con arreglo a criterios educativos y lúdicos, evitando dejarse llevar por la intensa publicidad que se lleva a cabo durante estas fechas lo que, en ocasiones, trae consigo conductas de cansancio temprano en su utilización o, incluso, de cierta decepción respecto a las expectativas que los anuncios publicitarios puedan haberles generado.
Recomendaciones
Así, entre las recomendaciones incluyen observar, verificando el etiquetado, que los materiales con los que están fabricados los juguetes no sean tóxicos; vigilar la presencia de aquellas piezas del juguete que, por su pequeño tamaño de forma separada, puedan suponer un riesgo para la seguridad de los niños y niñas y del mismo modo en lo que se refiere a partes afiladas o bordes cortantes y también asegurarse que la pintura incorporada a los juguetes no sea tóxica.
Recomiendan además que se evite adquirir juguetes que desprendan un fuerte olor, pues podría indicar que contiene elementos volátiles en el plástico que pueden ser nocivos para la salud. Abogan por procurar elegir juguetes cuya composición y diseño resulte lo más ecológico posible, atendiendo al impacto ambiental de los residuos que generen y también de los materiales empleados para su fabricación. Por ejemplo, son preferibles al respecto los juguetes hechos con materiales renovables, como madera o cartón, entre otros, que los fabricados mediante procesos industriales, como materiales sintéticos, plásticos, etcétera.
Asimismo, hay que priorizar los juguetes participativos que permitan jugar con familiares y amigos. Comparta sus juegos siempre que le sea posible y evitar los juegos y juguetes de contenido bélico o sexista, apostando porque sean cuánto más educativos mejor y sin olvidar que el juego es una forma de aprendizaje. También hay que considerar otro tipo de regalos como libros, ropa, material deportivo, entre otros.
Hay que leer siempre las etiquetas, reglas e instrucciones del juego o juguete que se vaya a adquirir. En el etiquetado deben aparecer, al menos, el nombre y marca del producto; razón social y dirección del fabricante o importador o vendedor; advertencias de uso y restricciones de edad, en su caso; especificaciones de la potencia máxima, tensión de alimentación que necesita y consumo energético en juguetes de funcionamiento eléctrico.
Además, debe figurar de forma visible la marca CE, que acredita que el fabricante o distribuidor garantiza que el juguete cumple con las exigencias esenciales de seguridad contenidas en las normas comunitarias y se debe conservar el ticket de compra y pedir la garantía del juguete, si procede.
Si desea ampliar esta información o realizar alguna consulta al respecto, los ciudadanos pueden dirigirse a las Oficinas Municipales de Información al Consumidor (OMIC), a las oficinas de atención al consumidor de las delegaciones provinciales de Sanidad, o utilizar el Teléfono del Consumidor (900-501089), de llamada gratuita.
