La Casa de las Marionetas recibió uno de los premios de Integra 4.0 en su primera edición con un aporte económico de 47.000 euros, dentro de una inversión total de 400.00 euros. Después de muchos avatares, este mes de otoño ha comenzado con su actividad de divulgación y programación de actuaciones en este espacio escénico abierto en Palomera. El centro cuenta también con una zona expositiva que alberga una muestra de marionetas de la compañía Cacaramusa y una heterogénea colección procedente de todo el mundo, presentando una variedad de técnicas de manipulación.
El diputado de Emprendimiento y Reto Demográfico, Javier Cebrián, ha estado en Palomera para conocer de primera mano cómo está funcionando esta iniciativa de Fernando Moya que abrió sus puertas en julio y desde entonces está desarrollando una intensa actividad cultura. El responsable de la Diputación de Cuenca se ha quedado maravillado con el cuidado y el amor con el que se ha llevado a cabo la Casa de las Marionetas, un espacio dedicado a darle la importancia que se merece esta disciplina de las artes escénicas.
Cebrián ha dado la enhorabuena al impulsor de esta iniciativa que es muy valiente y mejora la oferta cultural de la provincia en un pequeño municipio como es Palomera. Además, lo hace con un proyecto muy innovador a nivel nacional que busca inculcar en toda la sociedad, pero especialmente en los más pequeños, el amor por un arte como son los títeres y las marionetas.
El impulsor de esta iniciativa ha señalado que este proyecto es “cumplir el sueño de toda una vida”, porque esta Casa de las Marionetas permite plasmar en un espacio el trabajo de toda una vida en torno a los títeres. Moya ha explicado que en estas navidades programarán actuaciones de marionetas propias y también talleres porque ha defendido que los títeres son para todos los públicos y no solo para niños.
