El Grupo de Ciudades Patrimonio de la Humanidad de España (GCPHE) ha presentado en Dublín su oferta turística, cultural y patrimonial, ante una selección de los principales agentes de viajes irlandeses y periodistas especializados en turismo, en una acción conjunta con Turespaña y Paradores que forma parte de la estrategia de promoción internacional del Grupo en mercados prioritarios.
El acto ha contado con la participación de Antonia Olivares, alcaldesa de Úbeda y representante del GCPHE; María Teresa Lizaranzu, embajadora de España en Irlanda; Juan José González, en representación de Paradores; y Laura Pena, directora de la Oficina Española de Turismo (OET) en Dublín.
Una estrategia clave en un mercado de gran interés para España
Durante la presentación, la alcaldesa Antonia Olivares ha destacado la importancia del mercado irlandés para España, y ha señalado su creciente interés por los viajes culturales, experienciales y de calidad, segmentos en los que las quince ciudades del Grupo presentan una posición privilegiada.
“Irlanda es un mercado especialmente receptivo a destinos que ofrecen patrimonio, historia, cultura, gastronomía y experiencias auténticas. Nuestras ciudades tienen todo ello y mucho más”, ha afirmado Olivares.
El perfil del viajero irlandés, caracterizado por estancias medias altas, elevado gasto, fidelidad al destino y una gran afinidad con la cultura española, convierte a este público en estratégico para el desarrollo de productos turísticos sostenibles y de alto valor añadido.
Qué ofrecen las 15 Ciudades Patrimonio de la Humanidad
En su intervención, la alcaldesa ha subrayado que las ciudades del Grupo, desde las primeras reconocidas por la UNESCO como Ávila, Segovia o Santiago de Compostela, hasta las más recientes como Úbeda y Baeza, comparten un compromiso común: conservar, proteger y compartir un legado excepcional.
Así, ha continuado diciendo, las 15 ciudades constituyen destinos ideales para: Turismo cultural y monumental, con un legado histórico que se vive y se experimenta en cada calle, plaza, iglesia, mezquita, palacio o muralla; Turismo gastronómico, con restaurantes tradicionales, alta cocina y varios establecimientos distinguidos con estrellas Michelin; Turismo idiomático, al ser espacios perfectos para aprender español en entornos seguros y de tamaño humano; Congresos y reuniones, gracias a su amplia oferta de sedes históricas y servicios especializados; Turismo religioso, con catedrales emblemáticas, rutas de peregrinación y celebraciones como la Semana Santa, Turismo activo, con entornos naturales próximos a los cascos históricos, ideales para senderismo y deportes al aire libre; y Alojamientos únicos, entre ellos los Paradores, ubicados en monasterios, palacios y castillos rehabilitados, que permiten “dormir entre siglos de historia”.
Además, Olivares ha destacado la excelente conectividad, la seguridad ciudadana, la ausencia de masificación y la apuesta del Grupo por la sostenibilidad, la innovación y la preservación del patrimonio.
Ciudades que se viven: emoción, historia y alma
La representante del GCPHE ha puesto en valor el carácter “vivo y emocional” de estas ciudades, donde el visitante no solo contempla monumentos, sino que “vive la historia desde dentro”.
“Son ciudades con alma. Lugares donde el tiempo parece detenerse y donde cada visitante se convierte en protagonista de una historia milenaria”, ha afirmado Olivares. En este sentido, ha recordado también, que estas ciudades han sido moldeadas por civilizaciones diversas, tales como: íberos, romanos, visigodos, árabes, judíos y cristianos lo, que se refleja en una riqueza patrimonial única.
Invitación al público irlandés
La alcaldesa ha concluido con una invitación directa a los profesionales turísticos y al viajero irlandés. “Les esperamos en nuestras quince ciudades con los brazos abiertos para que descubran siglos de historia, se emocionen con nuestra arquitectura, disfruten de nuestra gastronomía y, sobre todo, conozcan a nuestras gentes”.
A modo de cierre, Olivares ha finalizado su intervención citando a San Juan de la Cruz, poeta universal ligado a Úbeda, como metáfora del sentimiento profundo que despiertan las ciudades Patrimonio al ser vividas y recorridas.
