La alcaldesa de Guadalajara, Ana Guarinos, ha asistido este viernes a las primeras escenas de la 35ª edición del Tenorio Mendocino, que ha comenzado su representación como es habitual en el enclave emblemático de la plaza de la concatedral de Santa María, tras el pasacalle desde el Liceo Caracense y la recreación de la Guadalajara del Siglo XVI.

La alcaldesa ha querido destacar “la excepcionalidad de esta cita única en España, que convierte el patrimonio histórico de Guadalajara en un escenario vivo y que involucra a varias generaciones de guadalajareños entre el elenco de actores y la organización teatral, gracias al ‘estilo y sigilo’ de Gentes de Guadalajara durante 35 años”.
Centenares de personas han recorrido junto a los actores los distintos espacios patrimoniales del casco histórico, convirtiendo las calles de Guadalajara en un gran teatro al aire libre. La atmósfera nocturna, el vestuario de época y la cuidada ambientación han contribuido a crear una experiencia cultural única, que año tras año atrae tanto a vecinos como a visitantes de otras localidades.
A esta primera representación también han asistido los cuatro tenientes de alcalde del Ayuntamiento de Guadalajara: Javier Toquero, Alfonso Esteban, Santiago López e Isabel Nogueroles, así como por los concejales Víctor Morejón, Chema Antón, Eva Henche, Roberto Narro y Begoña García, esta última también implicada directamente en la organización del evento como miembro activo de la Asociación Gentes de Guadalajara. Su presencia subraya el respaldo del equipo de Gobierno municipal a una cita cultural que forma parte del alma de la ciudad.
Esta es la primera de las dos representaciones programadas para esta edición, que continuará el sábado 1 de noviembre, si el tiempo lo permite. Declarada Fiesta de Interés Turístico Regional, la puesta en escena del clásico de Zorrilla vuelve a transformar las calles y monumentos de Guadalajara en un escenario vivo de teatro y tradición, gracias al impulso de la Asociación Gentes de Guadalajara y la participación de más de 170 actores aficionados.
La historia de Don Juan se escenifica en seis espacios patrimoniales: la plaza de Santa María (Hostería del Laurel), el Palacio de la Cotilla (casa de Doña Fina), el claustro del Liceo Caracense (celda de Doña Inés), el patio de los Leones del Palacio del Infantado (Quinta de Don Juan), los jardines del Liceo Caracense (panteón de la familia Tenorio) y la fachada del Palacio del Infantado (Aposento de Don Juan).
Como novedad, este año se han incorporado actores distintos en cada jornada, incluyendo antiguos participantes que retoman los papeles que interpretaron en ediciones pasadas, en un emotivo homenaje a la trayectoria de esta singular representación que cumple 35 años.

