El Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Cuenca, ha vuelto a exigir soluciones inmediatas ante el fracaso del modelo de transporte urbano implantado por el equipo de Gobierno socialista, que sigue acumulando quejas y problemas sin resolver.
Tal y como ha informado la presidenta de los populares, Bea Jiménez, junto a los fallos en la reorganización de líneas, donde ni los propios conductores saben dónde tienen que parar, retrasos y una aplicación móvil inoperativa, se suma ahora el abandono del mobiliario urbano instalado para el intercambiador, que costó más de 30.000 euros y hoy está en desuso. “Junto con el fracaso que supuso la modificación del contrato con la creación del denostado intercambiador, ahora nos encontramos con el abandono por parte del alcalde y su equipo de los usuarios”.

“Cuenca no puede seguir así. El transporte público es un servicio esencial y no puede convertirse en un quebradero de cabeza para los vecinos”, ha afirmado la presidenta del Grupo Popular, Beatriz Jiménez, quien ha recordado que el equipo de Gobierno prometió un sistema moderno y eficiente, pero la realidad es muy distinta: “Las líneas no funcionan, la información es confusa y el mobiliario está abandonado”.
Marquesinas y señalización en estado lamentable
Los populares en el consistorio denuncian que las marquesinas siguen mostrando horarios y líneas que ya no existen, lo que genera confusión entre los usuarios. Además, los paneles informativos no se han actualizado desde la última reconfiguración, lo que mantiene la desinformación en todo el servicio.
Frecuencias incumplidas y trayectos interminables
La líder popular ha asegurado que las frecuencias anunciadas tampoco se cumplen: líneas que debían pasar cada 30 minutos lo hacen cada 40, y la lanzadera al AVE, aunque mantiene una frecuencia de 15 minutos, sigue arrastrando los mismos problemas que el PP denunció desde el inicio: los conductores aseguran que no pueden cumplir los tiempos sin superar la velocidad permitida y que no disponen de margen para realizar las paradas de descanso reglamentarias. Un problema que persiste en el tiempo y pone en riesgo la seguridad y las condiciones laborales. La aplicación móvil, lejos de ser una solución, sigue mostrando información errónea y tiempos incorrectos, impidiendo planificar los desplazamientos.
Un intercambiador fantasma
El PP en el Consistorio recuerda que el intercambiador, presentado como la gran apuesta del Gobierno local, es hoy un símbolo del despilfarro y la improvisación: “Se gastaron miles de euros en tótems, bancos y marquesinas que hoy están abandonados, mientras los conquenses sufren un transporte urbano caótico”, ha denunciado Jiménez.
Esta denuncia se enmarca en la campaña #AsíNo, con la que el Grupo Popular está visibilizando el deterioro generalizado de Cuenca y la falta de mantenimiento en servicios e infraestructuras básicas. “Cuenca merece un transporte público eficaz, accesible y con información actualizada. Exigimos soluciones inmediatas”, ha concluido Jiménez.

