La Confederación de Empresarios de Cuenca denuncia que esta mediada se haya establecido sin respetar estos cauces, pues no se ha consultado previamente a empresas y sindicatos.
La Confederación de Empresarios de Cuenca lamenta que la reciente aprobación del Real Decreto-Ley sobre la ampliación del permiso parental se gata aprobado sin tener en cuenta el diálogo social.

En este sentido denuncia que nuevamente el Gobierno de España está tomando medidas de impacto para las empresas sin contar con los interlocutores sociales y sin respetar los cauces que se han establecido para encauzar estos temas.
Asimismo, reseña que es una medida más que se ha tomado sin previa consulta a empresarios y sindicatos, por lo que ya es una dinámica preocupante la que se viene produciendo, pues ignora el principio de concertación social que ha sido clave en la estabilidad económica y social de nuestro país desde el comienzo de la democracia.
Por todo ello reclama responsabilidad institucional y una vuelta real al diálogo social, estructura y eficaz, especialmente en materias sensibles que afecten al mercado laboral y donde es imprescindible el consenso y la participación de todos los agentes.
De hecho, recuerda que las empresas necesitan previsibilidad, seguridad jurídica y entornos regulatorios estables que les permitan operar con garantías.
Contexto complicado
CEOE CEPYME Cuenca visa de que estas decisiones se toman en un contexto difícil para las empresas que ya aguantan una tasa de absentismo muy alta que produce que 1,6 millones de españoles falten cada día a su puesto de trabajo.
Por otro lado, avisa de una pérdida de productividad por ocupado del 0,7% en el segundo trimestre y una propuesta de reducción de jornada a 37,5 horas semanales que no tiene en cuenta la realidad de los convenios y plantillas, ni las diferencia sectoriales y territoriales.
Más allá menciona una alta fiscalidad que está poniendo en apuros la competitividad de nuestras empresas y, a veces, su actividad, además de la imposición de obligaciones continuas la creciente burocracia y los pretendidos cambios de registro horario.
Por ello, para estimular la inversión, consolidar los avances en el empleo y frenar la desaceleración, es imprescindible evitar la proliferación de anuncios de cambios normativos que generen incertidumbre, rigidez y mayores costes, y que limiten la capacidad de empresas y trabajadores.

