Heredera del espíritu del movimiento conquensista, ha nacido la Plataforma en Defensa del Corredor Ferroviario de Mercancías por Cuenca. Su objetivo principal es la reapertura y adecuación del tramo ferroviario Tarancón-Utiel, clausurado para el tráfico de pasajeros, con el fin de convertirlo en un eje estratégico para el transporte de mercancías entre el centro y el levante peninsular.
La plataforma, que aglutina a ciudadanos y se apoya en el interés mostrado por el sector empresarial, sostiene que la recuperación de esta línea no es solo una cuestión de «justicia, equidad o solidaridad» con una provincia afectada por la despoblación, sino una decisión fundamentada en una sólida «razón económica».
«Quienes defendimos la autovía y el AVE por Cuenca, también el nuevo hospital, defendemos ahora el ferrocarril de Cuenca», manifiestan desde la plataforma, subrayando su compromiso histórico con el progreso de la provincia. Son conscientes de que los argumentos sentimentales no son suficientes, por lo que han centrado sus esfuerzos en demostrar la viabilidad y rentabilidad del proyecto.
Una ruta más corta y económica
El principal argumento económico de la plataforma es el ahorro de costes que supondría el corredor conquense. «La línea por Cuenca ahorra casi 90 kilómetros al trayecto actual» entre Madrid y Valencia, lo que se traduce en un ahorro de 180 kilómetros por cada viaje de ida y vuelta. Actualmente, los trenes de mercancías circulan por una ruta que pasa por Albacete, un trayecto más largo que el que permitiría la línea directa a través de Cuenca.
Este ahorro kilométrico, sumado a la posibilidad de utilizar convoyes de gran longitud a marcha lenta y una inversión «modesta», sin necesidad de electrificar ni desdoblar la vía en una primera fase, son los pilares de la propuesta económica de la plataforma.
Una oportunidad en un contexto de crecimiento
La iniciativa surge en un momento que consideran clave. Por un lado, la Unión Europea ha fijado el objetivo de alcanzar una cuota modal del 30% para el transporte de mercancías por ferrocarril para el año 2030, una cifra muy lejana al actual 4% que ostenta España. «Este gap es una ventana de oportunidad, ya que el crecimiento del sector será explosivo en los próximos años», aseguran.
A este impulso europeo se suma el crecimiento exponencial del Puerto de Valencia, que prevé duplicar su capacidad para el movimiento de contenedores en los próximos años. Para la plataforma, esta confluencia de factores hace que «Cuenca necesite al tren, tanto como el eje ferroviario de mercancías Valencia-Madrid necesita la línea por Cuenca».
El respaldo empresarial como anclaje
La plataforma destaca que su proyecto se asienta sobre dos «anclajes» fundamentales. El primero, y de especial importancia, es el interés ya manifestado por los empresarios en la reutilización de la línea conquense para el transporte de mercancías. Consideran que la implicación del tejido empresarial es una garantía de la viabilidad y la necesidad real de esta infraestructura.
El segundo anclaje son «los números que acompañan de largo» a la propuesta, y que se detallarán en los estudios técnicos y de viabilidad económica que, según anuncian, serán presentados a la vuelta del verano.
Con esta iniciativa, la plataforma busca no solo ofrecer una solución logística eficiente, sino también «sacar a Cuenca de la España vaciada e incorporarla al mayor eje de prosperidad de nuestro país que es el que une Madrid y Valencia». La movilización de la sociedad civil, que ya demostró su fuerza en reivindicaciones pasadas, se considera de nuevo un factor crucial para alcanzar este objetivo.
