El Grupo Municipal Socialista se ha opuesto “frontalmente” a los cambios en el Reglamento Orgánico Municipal (ROM) que Mariscal ha propuesto “desde la opacidad y la absoluta falta de negociación”, máxime después de que en el mes de abril se aprobara definitivamente y por unanimidad una modificación “que había sido negociada tras un duro trabajo de meses por parte de todos los grupos políticos con representación en el Ayuntamiento”.
Según ha explicado la portavoz del GMS, M. Jesús Gómez del Moral Martínez, “el único objetivo de esta modificación que nos ha pasado Mariscal sin ninguna explicación es acallar a la oposición”. Y es que la propuesta del equipo de Gobierno insta a reducir el tiempo de intervención de los partidos políticos de la oposición a 5 minutos, mientras mantiene el del Grupo Popular en 7 minutos.
Además, “Mariscal pretende limitar, aún más de lo que ya hay establecido, la capacidad de los grupos de la oposición de presentar propuestas”. Y es que propone reducir el número de mociones de 3 a 2 y limitar los ruegos a 3, en ambos casos por grupo político.
Aprovecha la concejala socialista para “protestar enérgicamente” por la forma de contabilizar las horas que impuso el equipo de Gobierno en el último Pleno. Y es que “por primera vez Mariscal decidió no sobrepasar las 8 horas de sesión plenaria, tal y como indica el ROM pero no el ROF (Reglamento Orgánico y de Funcionamiento), e incluyó en ese tramo temporal la hora que se estableció como receso para comer”. Algo, a su juicio, “absolutamente intolerable”.
Por todo ello, el GMS insta al alcalde ‘popular’ a que “mantenga la modificación del ROM que se consensuó entre todos los grupos políticos y, si quiere hacer algún cambio más, lo piense primero para que no perjudique a nadie y, sobre todo, lo negocie con la oposición como debe hacer”. Porque, le recuerda, “no tiene la mayoría absoluta y debe darse cuenta de una vez que no puede actuar por su cuenta”.
