El presidente de la Diputación Provincial de Cuenca, Benjamín Prieto, ha sido, una vez más, fiel a su cita con el pueblo de Villaescusa de Haro y ha asistido a la procesión en honor del Santísimo Cristo de la Expiración con motivo de sus fiestas patronales, que tuvo lugar este miércoles por la tarde y que contó un año más, como viene haciendo desde 1969, con la inestimable participación de una representación del Regimiento Saboya nº 6 del Ejército de Tierra.
Precisamente, Prieto quiso elogiar el compromiso de este Regimiento con el municipio de Villaescusa de Haro, que año tras año, y ya son 47, no falta a esta cita con las Fiestas Patronales del Santísimo Cristo de la Expiración, a la vez que remarcó el esfuerzo de ambos por mantener viva esta tradición.
El presidente de la Diputación llegó ayer a Villaescusa poco antes de las cinco y media de la tarde, pudiendo saludar antes del inicio de la procesión tanto a la Corporación municipal, encabezada por su alcalde, Cayetano Solana, como al coronel Guitiérrez del Olmo González, jefe del Regimiento de Infantería Mecanizada Saboya nº 6, al que expresó su agradecimiento por hacer todo lo posible para que una representación del Regimiento custodie un año más al Patrón de Villaescusa en unas fechas tan señaladas como es la celebración de las fiestas en su honor.
Medio centenar de militares, junto a los integrantes de la Banda de Música de Las Mesas, acompañaron a la imagen del Santísimo Cristo de la Expiración en su recorrido habitual por las principales calles de la localidad, que partió de la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción. Cortejo procesional al que se sumaron las autoridades civiles y religiosas, la Hermandad del Cristo, así como la Corte de Honor y numerosos vecinos, que arroparon al Patrón en su camino hacia su ermita, en el Antiguo Convento de las Madres Justinianas.
Allí, como manda la tradición, se procedió a la subasta de andas para, a continuación, proceder a la entrada de la imagen a su ermita. Momento en el que el pueblo de Villaescusa de Haro no dudó en dar muestras de agradecimiento al Regimiento Saboya nº 6 por ser fieles a esta cita y mantener viva esta tradición.
Un hermanamiento éste entre esta unidad militar y Villaescusa de Haro que se remonta al año 1969 cuando en plenas fiestas patronales del Cristo de la Expiración y coincidiendo con las maniobras militares de una patrulla en la localidad, dos obreros se cayeron a un pozo. El teniente de ese regimiento, poniendo en peligro su propia vida, intentó rescatarles sin éxito, siendo necesario auxiliarle para reanimarle. A raíz de tan heroico acto, el pueblo de Villaescusa de Haro quiso honrar a este miliar y a su regimiento haciendo un homenaje en su honor. Algo que ha perdurado en el tiempo y desde entonces un destacamento del Regimiento Saboya nº 6 participa activamente en las fiestas de septiembre y los vecinos de Villaescusa acompañan a esta unidad militar en la festividad de su Patrona, la Virgen del Rosario.
