La portavoz del Grupo Parlamentario Popular en las Cortes de Castilla-La Mancha, Lola Merino, ha asegurado que con las prohibiciones del Gobierno de Page, los agricultores y cazadores de la región “no saldrán más fuertes ni más unidos”, sino que lo harán “más arruinados y divididos”.
Así lo ha destacado Merino en declaraciones a los medios, tras visitar Mota del Cuervo (Cuenca), junto al portavoz municipal del PP, Miguel Olivares y varios agricultores del municipio, donde ha señalado que la situación económica “ya era muy difícil en 2020” y en lo que llevamos de año se ha visto agravada por la pandemia, por el temporal Filomena y las medidas contradictorias impuestas por Page.
La portavoz parlamentaria del PP ha señalado que la caza es una fuente de ingresos, de empleo y de fijación de población en las zonas más deprimidas de Castilla-La Mancha, pero además es “necesaria para controlar el exceso de población de varias especies como los conejos, ciervos o jabalíes que ocasionan cuantiosos daños agrícolas y forestales, pueden trasmitir enfermedades y ocasionan accidentes de tráfico con consecuencias trágicas.
“Prohibir la caza como actividad de control supone agravar los daños a los agricultores y aumentar los problemas graves desequilibrios poblacionales de estas especies, que traen consecuencias nefastas para el medio ambiente y las personas”, ha aseverado Merino.
Además, ha recordado que el PP-CLM, desde la pasada legislatura, viene debatiendo este problema en las Cortes regionales, lo que supuso que el Ejecutivo de Page declarase determinadas zonas de emergencia cinegética por daños en cultivos agrícolas.
Merino ha criticado que Page publicara un decreto que reconocía la caza de ciertas especies como actividad necesaria y, un mes después, la ha vuelto a prohibir. Por ello, ha invitado a García Page y a los consejeros de Desarrollo Sostenible y de Agricultura, a que visiten cultivos de cereal y plantaciones de leñosos y comprueben los daños que los conejos están provocando en las explotaciones agrícolas.
Por ello, ha apostado por un refuerzo medidas como la limpieza de cauces fluviales o de majanos impidiendo que sirvan de refugio de estos animales en los municipios afectados.
Además, deben reforzarse las medidas de seguimiento y control de poblaciones de conejos en las infraestructuras viarias y en otras zonas de seguridad donde existen limitaciones para el ejercicio de la caza.
