La Subdelegación del Gobierno de España en Cuenca ha desplegado todos los recursos humanos y materiales a su disposición para asegurar la movilidad por las carreteras del Estado en la provincia, especialmente para el abastecimiento de los servicios esenciales y vialidad, así como la salud de los ciudadanos, con la llegada el 7 de enero del temporal de nieve producido por la borrasca Filomena y la posterior ola de frío.
Hay que destacar la constante coordinación con las distintas administraciones, dentro del Comité de Análisis y Seguimiento Provincial, convocado diariamente por la Delegación Provincial de la Junta de Comunidades y que contó con la asistencia del subdelegado del Gobierno, Juan Rodríguez, así como representantes de Policía Nacional y Guardia Civil.
La Subdelegación del Gobierno en Cuenca redactó el Plan de Vialidad Invernal 20/21 con la colaboración de todas la administraciones implicadas. Gracias a ese plan, se ha podido prestar un mejor servicio a la ciudadanía, desarrollando un conjunto de iniciativas y medidas destinadas a la prevención de posibles daños a la población e infraestructuras, tras las intensas nevadas, así como el mantenimiento operativo.
Sirvan como ejemplos, los servicios prestados, en pleno temporal ‘Filomena’ por la Guardia Civil en las rutas de reparto de las vacunas covid-19, así como las ayudas a las cooperativas de farmacia para hacer llegar los medicamentos más urgentes hasta sus destinos, o la atención a los camioneros en las áreas de servicio.
Durante el tiempo que ha durado activada la fase de “preemergencia” por parte de la Delegación del Gobierno de España en Castilla-La Mancha, todos los recursos de la Subdelegación del Gobierno en Cuenca han estado activados. En ese sentido, se ha contado con 126 trabajadores de la Demarcación de Carreteras del Estado, más de 400 agentes de la Guardia Civil y 24 policías nacionales diarios de la Unidad de Seguridad Ciudadana.
Asimismo, el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Fomento) ha puesto en funcionamiento, en los 978 kilómetros entre autovías y carreteras nacionales del Estado, 30 quitanieves-dispersor de sal, 28 depósitos con 4.720 toneladas de fundentes y 8 depósitos con 440.000 litros de salmuera.
También ha intervenido la BRIF del ‘Prado de los Esquiladores’ como recurso para ayudar a municipios afectados por las grandes nevadas y que así lo solicitaron: Tarancón, Motilla del Palancar, Huete, La Alberca de Záncara, El Provencio, Minglanilla y Ledaña.
Desde ayer lunes, como consecuencia de la evolución favorable de la meteorología, la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha ha procedido a desactivar la fase de ‘preemergencia’ y activar el nivel ‘alerta’, el más bajo del protocolo.